15
GIRASOL
Kazumi no se queda a escuchar la historia, diciéndole a Kazutora que le fastidia todo el humo de cigarro y que necesita aire fresco. Su hermano asiente y le ofrece ir con ella al exterior, pero le asegura que no tardará y que su presencia es necesaria allí porque es el tercero al mando en la pandilla. Por suerte, eso lo convence y la deja marcharse sola, pero mantiene una mirada salvaje en todos para que ni siquiera piensen en acercarse a ella.
Un suspiro tembloroso abandona sus labios cuando sale, forzándose a inhalar y luego exhala, intentando tranquilizarse. Quizá es un ataque de pánico, piensa, y desearía que los recuerdos no estuvieran claros en su memoria como si todo acabara de ocurrir la noche anterior a penas. Era algo tarde en la noche ese trece de agosto hace dos años cuando el teléfono de la casa sonó y la madre de Kazutora casi cayó al suelo luego de que finalizara, saliendo directamente a la estación de policías porque Kazutora estaba detenido por allanamiento y asesinato.
Su madre fue puesta al tanto de los cargos apenas llegó. Kazutora, junto a un cómplice que después fue identificado como Baji Keisuke, entraron a la tienda de motocicletas S.S. Motors y Kazumi casi vomitó cuando escuchó el nombre del dueño y víctima, que fue asesinado por Kazutora de un golpe en la cabeza con las pinzas que utilizaron para intentar llevarse una de las motocicletas.
—Shinichiro-san... —musita en un hilito de voz, sintiendo las lágrimas quemándole en los ojos.
La primera vez que lo vio, lo primero que se percató era de lo mucho que Mikey y él se parecían. Shinichiro era gentil, sonriéndole cuando la veía y siempre dispuesto a darle el visto bueno a los postres que preparaba, y fue la primera figura paterna que tuvo la cual no le hacía daño como su padrastro y su padre biológico, el señor Hanemiya. Pero esa noche, lo perdió justo como perdió a su madre cuando tenía ocho años.
Todo cayó en un espiral de desgracia después de eso.
Toma un par de respiraciones profundas mientras seca las lágrimas que se alcanzaron a derramarse por su rostro, asegurándose de estar más calmada antes de regresar con Kazutora, fijándose en como Chifuyu respira difícilmente sobre el suelo, cubierto de su propia sangre. Quiere ayudarlo, pero no puede, así que alza la mirada una vez que está de nuevo en su sitio.
—Ese fue el día que nos separamos —concluye Keisuke, poniéndole un fin a la historia y sonriendo. A Kazumi se le revuelve el estómago—. Yo no fui a la correccional porque Kazutora declaró a mi favor. Estaba esperando a que lo liberaran —sigue.
—Muy bien, Baji. En ese caso, eres más que bienvenido —aprueba Hanma—. Ten. Es la chaqueta de Valhala. —Keisuke toma la chaqueta en el aire y se la coloca, sonriendo al acomodarla bien en su cuerpo—. Ven acá, Kazumi —ordena, palmeándose el muslo derecho con una sonrisa floja. Takemichi la ve comenzar a caminar, tomando la mano de Baji para subir a la tarima y toma asiento obedientemente, permitiendo que Hanma le coloque encima la chaqueta de Valhala que acaba de quitarse. Después, sus ojos van hacia él—. Ve a decirle a Mikey que en una semana, el 31 de octubre, en el cementerio de autos, Valhala y la ToMan van a tener su batalla final —declara, sujetando a Kazumi por la cintura y la acerca más a él.
ESTÁS LEYENDO
how to save a life | tokyo revengers
FanfictionEn donde Hanagaki Takemichi intenta una y otra vez evitar la muerte de Murata Kazumi para así salvar a Sano Manjiro del abismo en el que está destinado a caer. | TOKYO REVENGERS X OC |