Homofóbico || Ohmnanon

32: OHM

El olor de Nanon es demasiado familiar para mí, y disfruto que sea lo primero que siento, cuando apenas estoy despertando.

No estoy seguro de poder compararlo, porque a veces confundo los aromas que recuerdo.

Excepto el suyo.

Cuando abro los ojos, está sobre mí y sus dos manos están aferradas a mi pecho.

—Nanon —susurro acariciando su cabello con dificultad porque me duelen un poco las articulaciones y él abre los ojos alarmado.

—¿Te sientes mal? —me pregunta al instante y niego con la cabeza— ¿Pasó algo?

—Solo quería darte los buenos días —respondo besando su frente y hace un puchero volviendo a apoyarse en mí.

—Eres como un reloj —se queja cerrando los ojos— me tuviste toda la noche despierto, merezco unas horas más.

Me río mirándolo y llegan recuerdos como flashes cortos a mi mente por sus palabras.

Ya entiendo por qué está cansado.

El sonido de las olas está de fondo y sé que llevamos un tiempo durmiendo acá, pero no estoy seguro de cuánto.

—¿Lo hicimos dos veces? —le pregunto captando su atención.

Él me ha dicho que puedo preguntarle lo que sea, para que mi mente esté más clara.

—Tres —dice estirándose.

—¿Lo hice bien?

—Muy bien —responde acercándose a mi boca y me da un beso corto— pero ya debo irme a casa o mi esposo va a darse cuenta, recuerda que estoy casado.

Entrecierro los ojos porque sé que me está probando.

—Conmigo —le digo ofendido.

—Muy bien, te ganaste el desayuno por recordarlo —menciona levantándose.

Lo veo caminar al armario y suspiro mirando su cuerpo.

A veces pienso en porqué alguien como él está desperdiciando su vida conmigo.

Nanon podría solo irse, y estar con cualquier persona mejor que yo, pero no lo hace.

Cuando se coloca una camiseta y sale dejándome solo, me acerco a la ventana para abrirla.

Hay sol afuera.

Agarro mi cuaderno, pero ahora, aunque lo intente, ya no es posible para mí sostener un lapicero.

Abro una página al azar y leo lentamente la primera línea.

"Nanon pinta tus uñas porque te gusta pero no puedes hacerlo tú."

Sonrío mirándolas y noto los ositos que ha hecho en ellas.

Me gusta.

"Cortinas"

Repito esa palabra en cada página, y sé que es importante, pero no entiendo por qué.

Sé que tiene que ver con Nanon.

"Nanon es el amor de tu vida."

Lo sé.

"Nanon es tu esposo."

Lo sé también.

Me pregunto si he escrito todo esto porque no confío lo suficiente en mí.

"Nanon no come mantequilla."

Oh.

"La mantequilla es amarilla, y te la pone en el desayuno porque a ti sí te gusta."

Veo un círculo amarillo al centro y suspiro al leer lo que dice abajo.