Wings And Trust (ᴋ.ᴛ.ʜ ʏ ᴛᴜ)

₄₇

Tn.

-Pudiste quedarte durmiendo- dije mirando por la ventanilla del auto de Taehyung.

Se notaba que aún no eran siquiera las seis de la mañana, pareciera que es de noche. He decidido que levantarme más temprano de lo normal es muchísimo mejor, ya que podía llegar más temprano al hospital y así aprovechar las horas antes de mis prácticas con mi hijo. Días atrás me he quedado a dormir junto con él, pero he tenido que hacer excepciones, no puedo aislarme de casa todo el tiempo que quiera porque Eun-Sang también necesita de mí.

-Me quedaré con Dae unas horas y luego puedo irme a trabajar- es lo que me contesta él mientras conduce

Minutos después hemos llegado al hospital. Ambos bajamos del auto al mismo tiempo, Taehyung lo bloqueó, y yo esperé en mi lado esperando a que rodearse el auto, sabía que vendría hacia mí para tomar mi mano y cruzar nuestros dedos.

Una vez hube saludado levemente a varias personas que me encontré de camino a la habitación a la que me dirijo, di unos leves toques en la puerta de esta antes de pasar. Tae pasa detrás mío. De inmediato encuentro a mi lindo bebé dormidito.

Hay una enfermera con él, a la que yo ya conocía muy bien puesto que está frecuentemente aquí haciéndose cargo del chequeo y demás. Está inyectando algo en el suero que tiene puesto mi niño.

-Hola- dije en voz baja, regalándole una amable y discreta sonrisa a la enfermera

-Hola, que bueno que vinieron- hace una reverencia- pueden quedarse con él todo lo que quieran, yo ya me iba- nos sonríe cortamente y pasa por nuestro lado

-Siempre que vengo está dormido- habló Tae en lo que nos acercábamos a la cama

-Es una lindura- murmuré mirándolo dormir, acaricié su mejilla con mi dedo índice, era tan pequeña que aveces era torpe sobarla con la mano entera

-Casi son sus ocho meses- comentó Tae

-Espera- dije para luego bajar la talanquera con cuidado de no hacer ruido, Tae se sentó sin quitarle los ojos de encima, consternado.

-¿La doctora ha dado opiniones buenas?- me pregunta, y es cuando me doy cuenta que por discutir tanto ni siquiera hemos hablado sobre como ha ido la evolución de Dae

Tae nota que me tardo en responderle, pero no hace por hablar, solo toma mi mano y me lleva con él a uno de los sillones. Se sienta primero, y esa es una clara señal de que me siente en sus piernas. No pongo objeción alguna para hacerlo. Al sentarme no debió haber pasado un segundo cuando me abrazó por la cintura, creo que llevábamos días sin estar de esta forma. Por eso la transparente incomodidad.

-Ahora si, mi vida, dime- sentirlo llamarme así y no por mi nombre como lo ha hecho estos días, enciende una creciente emoción dentro de mi estómago. Puede actuar imbécil todas las veces que quiera, es posible que lo odie varias horas he incluso un día completo, lo imposible es que deje de amarlo.

-Bueno, la doctora Minyeon habló conmigo ayer- él hace un sonidito en afirmación y yo sigo contándole- y bueno, por suerte Dae-hyun está mejorandose día a día. O eso indican los exámenes.

Tae me mira con incredulidad- ¿es todo?

-Uhmm sí, todo- respondo, afirmo también con la cabeza sin poder ocultar esa ligera felicidad

-Pero eso es un gran avance¿no?- dijo con entusiasmo y yo sonreí- ¿todo es con las quimioterapias?

-Claro que lo es. Te explicaré- junto mis manos - según lo que estudié, cuando tienes algún tipo de cancer, la quimioterapia es un conjunto de fármacos que actuan al evitar que las células cancerosas del cuerpo se dupliquen y se dividan en más células.