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Ambas miradas conectaron por unos cortos (muy largos) minutos. Era como si fuera un duelo, ninguno de los dos parpadeaba. Ni siquiera se daban cuenta de que los gemelos los veían con cierta inquietud y curiosidad, siendo esta última disfrazada de asombro por el atrevimiento de su hermano sabiendo que el chico era mayor que él.

Sunoo le observaba con obviedad y cierta diversión, entonces su sonrisa se apareció entre sus labios con algo de sorna. Era correspondida, claro que sí, con una sonrisa petulante e irónica acompañada de una mirada llena de chispas de curiosidad, él estando expectante a lo que sea que fuera a decir el de ojitos zorrunos.

-Pues, he estado en el primer lugar desde que inicié la carrera. No importa cuantas veces falle el experimento, hasta no conseguir el resultado no me rindo jamás, porque no va conmigo. Mis métodos son bastante diferentes a los comunes y en múltiples ocasiones he vencido con proyectos a mis propios maestros de la universidad. Puedo trabajar incluso en las situaciones más deplorables sin reprochar o fallar en el resultado. Siempre consigo lo que deseo, como lo deseo y cuando yo lo quiero. Otra cosa, um.... Confidencialidad me parece que decía en el correo ¿no?, a mí pueden confiarme secretos de estado o el nombre y dirección del jefe de una mafia poderosa, pero jamás va a salir de mi boca nada. ¿Algo más?

HyunJin no pudo contener una carcajada al ver la escena en la que ni él, ni YeJi habían intervenido hasta el momento. Ella le dió en respuesta un ceño fruncido y un gesto de desaprobación.

-Jin —le reprochó—

-Lo siento hermanita, pero... Parece que él te venció, —canturreaba con burla, para después sólo preguntar— ¿no tienes algo que decirle, eh hermanito?

El mencionado bufó un tanto molesto por las palabras dichas con anterioridad, para volverse hacia el tal Kim y preguntar, otra vez.

-Bien, ¿y con todo eso qué? Se ve que eres muy inocente y sensible, parece que a la primera falla acabarías llorando como un bebé indefenso. ¿Qué respondes a eso?

-Mi lado emocional no influye con el profesional qué yo soy, y aunque llore ¿qué harás tú? ¿Consolarme? Ja, no lo creo niñato engreído.

Ya los mayores estaban listos para ver la escena de agresión qué ocurriría luego de aquellas respuestas dadas por el postulante más único que habían visto hasta el momento. Seguramente Riki iba a explotar agarrándolo a golpes. Estaban preparados para llamar a seguridad, cuando algo salió de aquellos belfos corales.

-Bien... Ya veo... ¿Así van a ser las cosas sí te contratamos?

-Sólo sí sigues cuestionándome, joven Hwang... —hizo una pausa tratando de recordar el nombre de quién parecía estar interrogando cosas innecesarias—

-Riki. Hwang Riki. —completó para ayudarle al otro a decir su nombre ¿ayudarle?, no, no le estaba ayudando, sólo quería que dijera bien su nombre—

-Como te dije, sólo si decides seguir con eso de cuestionar tonterías acerca de mí, Hwang Riki.

Y sin siquiera darse cuenta de lo que les ocurría en ese preciso momento, ambos se habían sumergido de nuevo en un sitio dónde sólo ellos existían. Desafiando el uno al otro. Como si lo que ocurriera fuera solo una competencia entre ambos para ver quién era más obstinado, cuando lo que realmente había era una tensión que generaba aquella idea.

Antes de que pudiera pasar cualquier cosa entre esos dos, escribió algo en un post-it para entregarle el papel al mayor.

Ve y dile al de seguridad que eche a todos, este niño se queda con el trabajo.
Sólo échalos con la excusa de que hemos tenido un inconveniente, ingenia algo en lugar de mirarlos burlonamente.

You're My Criminal [SunKi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora