-Me duele mucho el estómago, ayúdame por favor.
Sentí sus manos sujetando mis brazos, levantándome lentamente.
-Así, con cuidado, no te fuerces.-Otro calambre hizo que volviera a agacharme.-¿Puedes ponerte en pie?-Negué con la cabeza.-¿Te duele mucho?-Asentí.
Apartó la bandeja con cuidado y me cogió en brazos. Sentí su cuerpo, sentí su olor tan cerca que por poco se me detiene el corazón. Me llevó a la cama y me tapó. Regresó al pasillo, metió la bandeja y cerró la puerta sin hacer ruido.
-¿Quieres que avise a tu tío?
-Está en una reunión.
-¿Llamo a la enfermera?
-Está en el pueblo. La he intentado llamar dos veces.-Me hice un ovillo, el dolor era muy fuerte.
-Voy a buscarte algo, ¿te podrías quedar en cama un rato? No tardo nada.
-No hace falta
Sentí su mano en el hombro.
-Deja que te ayude.
Asentí y él se fue. Era extraña la situación, porque no estaba acostumbrada a que me tratara con tanto cuidado pero sobre todo a que me preguntara si algo me parecía bien o no, era un Chris que no estaba acostumbrada a ver. Los cólicos eran cada vez peores, quería poder dormir aunque fuera un rato para que dejara de doler.. Chris estaba tardando mucho, ¿a dónde había ido a buscar la bolsa? ¿al pueblo?
Escuché la puerta abrirse de nuevo.
-Ya he vuelto.
Se arrodilló a mi lado y me puso la bolsa en el vientre. Su calor fue un alivio inmediato. Sentí el aroma de algo dulce y abrí los ojos.
-Tienes que beber esto.
Me reí.
-¿Pretendes envenenarme?
Dio un respingo y sonrió, por primera vez en mucho tiempo veía su sonrisa de nuevo.
-Si te digo que no, ¿me creerías?
Me incorporé un poco y me llevé el baso a los labios, sabía a algo dulce, muy dulce, pero no supe identificar. Cuando terminé el contenido del vaso me dejé caer de nuevo en la cama.
-¿Mejor?
-Algo sí, gracias.
-No hay de qué.
Dejó el vaso en la mesilla y me tapó de nuevo.
-Gracias por ayudarme y por cuidar de mí.
-No he hecho nada
Negué con la cabeza.
-Me has estado trayendo comida estos días y ahora estás aquí cuidándome, así que sí, te daré las gracias aunque no lo quieras.-Dio un respingo, luego fingió que no había pasado nada, pero yo lo había visto.-¿Crees que no me iba a dar cuenta de quién me traía las bandejas?
-No, pensé que no me verías.
-No eres tan rápido.
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Renasci (Mortem 2)
FantasiAunque yo había regresado, ella también lo había hecho. Todos estábamos en peligro aunque no lo supiéramos, era peligrosa y volátil. Las brujas se habían levantado en pie de guerra y el instituto se estaba convirtiendo en un campo de batalla. Nuest...