No eran capaces de alejarse de las puertas de enfermería, había hecho guardia durante semanas, incluso meses, a la espera de algún cambio de algo diferente. Pero solo habían conseguido tristeza y desesperación. Cada vez que entraban solo podían oler el aroma de piel quemada. No creían en su muerte porque su cuerpo seguía en el mismo estado que el primer día, por lo que algo extraño pasaba, pero por mucho que buscara en libros no encontraba la respuesta.
Entró y vio de nuevo la misma escena de todos los días, un cuerpo carbonizado, con surcos de piel roja, con heridas en bastante mal estado. Rozó las sábanas con las yemas de los dedos. Ismael la miraba con tristeza, con mucha melancolía. La bruja se levantó y juntó sus frentes, la de la bruja y la de la híbrida. La añoraba.
-Ojalá pudiera tenerte aquí de vuelta Ali, te extraño.
La tapó con las mantas y la besó en la frente, era un tacto extraño y un poco incómodo, pero no dejaba de ser su Ali. Estuvieron allí unas cuantas horas, sin decir nada, sin mirar a nadie más que a ella. Recordaba sus rasgos antes de la batalla, su sonrisa, su motivación. La manada aunque hubiera pasado tanto tiempo no dejaba de preguntar sobre ella, sobre si se despertaría, pero no tenían respuestas. Ni ellos mismos las sabían.
-Deberíamos irnos ya, mañana tienes examen de literatura
Ella dudó, miró a su amiga de nuevo, pero sabía que de nada valdría quedarse allí eternamente. Se inclinó de nuevo y besó su frente, a la espera de que el contacto físico hiciera más sencilla esa comunicación que no llegaba nunca.
ESTÁS LEYENDO
Renasci (Mortem 2)
FantasyAunque yo había regresado, ella también lo había hecho. Todos estábamos en peligro aunque no lo supiéramos, era peligrosa y volátil. Las brujas se habían levantado en pie de guerra y el instituto se estaba convirtiendo en un campo de batalla. Nuest...