Capítulo 36: Aquí es donde todo empezó y aquí debe terminar.

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—Quiero el divorcio

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—Quiero el divorcio.

El rostro de Matthew se congeló. Mi respiración estaba agitada. No respondió.

—Estoy cansada de esto, ya no quiero más.

—Hiciste una promesa. Jamás te irías de mi lado. —Sus palabras sonaban heridas.

—Creí que sería feliz. —Siempre lo creí, pero no lo fui. — Creí que si seguía todo como se había planeado sería feliz.

—Tu de verdad....¿Me dejaras? —Me miró, había tristeza y un toque de molestia en sus ojos.

—¿En serio crees que valdría la pena quedarme?

—No lo sé, pero tu lo prometiste.

—Eso fue porque te amaba, te amé desde el primer día que te conocí en aquella cena.

—Pero ya no lo haces.

—No lo hago.

—¿Es por Mark? ¿lo amas a él?

—No metas a Mark en esto. Esto se trata de nosotros, no de él.

—¿Aún existe un nosotros? — Al menos algo quedaba. —Si te dejo ir, ¿algún día volverás a mi? — Pregunto

¿Volvería a él?

—No me hagas esto, no más. Ya no.

—Prometiste estar a mi lado, tu lo hiciste.

—Lo hice, al igual que tu y míranos, ¿qué fue lo que pasó? ¿Crees que todo esto está bien? míranos Matthew ¿cómo hemos acabado así?

—Evelyn...

Iba a responder pero las puertas del ascensor se abren. El chillido emocionado de Isabel salta del ascensor junto a ella abalanzándose sobre Matthew, algo confundido la atrapa en sus brazos.

—¡Debo decirte algo! —Grito emocionada.

—No es el momento Isabel. —La interrumpió Matthew soltándola.

—¡Estoy embarazada! —Soltó así nada más.

En ese momento todo se detuvo. Isabel siguió gritando eufórica, sentí como el piso se movía debajo de mis pies.

Ella estaba...Embarazada.

Ella lo había logrado.

—¿Qué dices..? ¿tu, de verdad? —Confundido Matthew miró a Isabel, ella lo abrazó con fuerza, Matthew correspondió el abrazo desconcertado.

Ella finalmente había hecho lo que yo no pude hacer.

Ahora ya no quedaba nada.

Mi único propósito ya no era mío.

—Matthew...—Balbucee.

Él me miró sobre el hombro de Isabel sin soltarla. Su deseo más preciado sería realidad, y no sería yo quien lo hiciera.

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