• Vitam Aeternam ~ [JIKOOK] •

37. Deterioro

Mientras las personas que pasaban a su lado le saludaban, Jimin sentía las náuseas en la boca de su estómago, en conjunto con la incómoda sensación húmeda del sudor en su nuca. Sonreía de la manera que podía, intentando reír a los chistes ajenos y responder positivamente a los halagos de la gente que parecía verle como alguna clase de referente en la vida. Eso último le hubiera llenado de satisfacción anteriormente, pero en ese instante no podía evitar desear estar lejos y no ser el foco de la atención. Algo se sentía diferente con él, y más allá de que había estado hipersensible últimamente, siempre con aquella sensación de asfixia en su garganta, tenía la inquietante sensación de que alguien le observaba y seguía constantemente.

Cuando las personas dejaron de requerir su atención, se sentó en una de las sillas de plástico del parque trasero con la compañía de su novio sentado a su lado.

Mientras Jungkook miraba hacia otro lado y estaba tranquilamente en silencio, Jimin miraba a su alrededor, viendo a las personas pasar de un lado a otro, encontrándose con amigos y teniendo conversaciones que lucían entretenidas. Desgraciadamente él sólo podía sentir inquietud e incomodidad.

No importaba lo que se viera fuera de su cabeza. En momentos como ese no se sentía como solía hacerlo; entretenido y cómodo como pez en el agua rodeado de las personas que adoraban su fraternidad, su gran familia. Eso era una historia, pero dentro de la mente de Jimin era otra.

Puedes oler el olor a podrido desde aquí. Podrido. Tan podrido como tú. Lo llevas contigo. Y va a matarte.

Jimin apretó los dientes, mordiendo su labio inferior y con su corazón volcándose como si alguien estuviese tirando de él. Quería que se callara.

Te están mirando, Jimin.

Levantó su mirada de golpe y examinó su alrededor con el rápido movimiento de sus ojos. Había demasiadas personas por todos lados, nunca podría identificar quién le miraba y eso era aún más aterrador. Todo su cuerpo se puso rígido, bajó su cabeza y frotó sus ojos, sintiendo que su cerebro estaba siendo masticado en ese instante.

Te han descubierto. Saben lo que haces. Saben que eres una farsa. No puedes esconderte. No pue-

- ¿Te sientes bien?

La voz de Jungkook le empujó fuera de su espiral mental y le obligó a hacer contacto visual.

Luego de negar y poner como excusa un repentino dolor de cabeza, se las ingenió para alejarse de su novio y del jardín.

- No podrás convencerme de que estoy mal. No lo estoy.

Caminó a lo largo de la casa decidido a ir hacia el baño que estaba en el pasillo de su habitación.

- Vete de mi cabeza de una vez por todas. Te he superado, te he mantenido lejos y lo seguiré haciendo - hablaba en un tono bajo mientras no detenía su caminar – Dame... dame la fuerza que necesito para vencerlo... - murmuró en forma de mantra mientras subía las escaleras – Dame la fuerza y la voluntad para deshacerme de mis debilidades y de todo lo que quiere convencerme de que no puedo lograrlo... - dobló en el pasillo, alejándose de la gente en el descanso de la escalera – Tamon... te necesito... necesito librarme de-

Las palabras quedaron en su boca sin poder salir cuando algo empujó su cuerpo contra la pared, desorientándolo. Su cabello fue jalado sin gentileza y su cara presionada contra la pared duramente. Un cuerpo se pegó rígidamente contra su espalda, amoldándose a su cuerpo. Jimin forcejó, moviéndose con agresividad para que le soltasen a toda costa. Pudo mover su rostro para mirar a su agresor, pero éste tenía su cabeza completamente cubierta con una máscara de lobo. Sólo pudo ver la chaqueta de Alpha chi lambda cubriendo el torso de la persona.