"轟" (Shoto) La Bestia de Hielo y Fuego (Todomomo)

꧁Cap. 29꧂

Shoto se encontraba caminando a traves de las calles del festival siendo arrastrado por Kaminari y Kirishima quienes lo alejaban cada vez más del lugar en donde había dejado a Momo haciendo aún más fuerte la extraña sensación de temor que se instalaba en su pecho siendo este el presagió que su alma le daba para advertirle de la gran tempestad que se avecinaba.

—¿Y qué hacemos ahora mientras esperamos a la chicas?— preguntó Kaminari mientras colocaba sus brazos atrás de su cuello y se recargaba.

—¿Qué tal si vamos a los puestos de comida? Mina me tiene a dieta y no he podido probar ni un solo bocadillo callejero desde hace un mes— dijo Kirishima diciendo lo último en un susurro como si su prometida fuera capaz de oírlo.

—Mmm... no lo sé, ¿tú que dices, Todoroki?— pregunto el rubio con su buena vibra de siempre ignorando por completo las preocupaciones del bicolor.

Shoto no contestó a su pregunta y simplemente se limito a mantener su vista justo en la dirección en donde había dejado a Momo hace un par de minutos.

De pronto, para sacarlo de su burbuja, Kaminari colocó su brazo alrededor de sus hombro mientras decía animadamente:

—Ya, tranquilo, Todoroki. Momo no morirá por dejarla algunos minutos sola— dijo Kaminari tan ausente de la situación que el bicolor tuvo que retener el impulso de quemarlo vivo por su ignorancia.

—Kaminari tiene razón— dijo Kirishima uniéndose a la conversación entre ambos —Has estado muy pendiente del bienestar de Yaoyorozu durante todo el tiempo que llevo de conocerte. Es hora que te des un pequeño descanso, ¿no crees?

—Ustedes no entienden. Ella esta...

—¡No le pasara nada, Todoroki!— reprimió Kaminari los pretexto de Shoto —Mejor vamos a la ceremonia de inauguración del festival que esta apunto de empezar— señaló el rubio a un gran tumulto de gente sentada alrededor de un escenario —Siempre hay una representación Kabuki sobre lo que paso en esta misma fecha años atrás en el periodo Edo. El día en que la bestia salvó a nuestros ancentros de los soldados del emperador que amenazaban con destruir la aldea.

—Para ser un idiota, en serio sabes mucho de ese tema— dijo Shoto con desiteres pero ciertamente asombrado por su saber del festival.

—Kaminari siempre le ha fascinado el festival de hielo y fuego y nunca se pierde ni un solo instante de él— le informó Kirishima mientras regresaba de un puesto de comida y le daba un buen mordisco a uno de los dorayakis que había comprado —Mmm... realmente Mina lo cocino bien.

—Bien, entonces vamos a comprar nuestra comida para irnos a sentar a ver la representación— dijo el rubio con alegría mientras comenzaba a empujar al bicolor hacia uno de los puestos.

Shoto no tuvo más opción que acceder a las peticiones de ambos y seguirle el juego mientras trataba de olvidarse de aquella horrorosa sensación que abordaba su pecho sin parar. Esperaba que no fuera lo que esperaba que fuese.

Los tres jovenes se dirigieron a comprar los bocadillos que disfrutarian mientras observaban la representación Kabuki de un suceso que Shoto se sabía de memoria. Al menos sería un poco entretenido ver como los humanos veían su "intervención" ancestral en una obra de teatro.

Después de comprar demaciados bocadillos para el gusto de Shoto, todos se fueron a sentar en las gradas colocadas al rededor del escenario para esperar el comienzo del espectáculo.

Kirishima devoraba con desesperación la comida que había comprado llevándose la mirada asqueada del bicolor mientras que Kaminari coqueteaba con la pequeña chica pelirroja quien en definitiva, era menor que él.