🌼Capítulo 33🌼

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Era un poco extraño, por lo general, Yoongi siempre despertaba antes que Jimin, pero por primera vez, Minnie había despertado primero que su oso.

Se había sentido un poco perdido tras abrir sus ojitos y no ver las conocidas paredes o techo del granero en el cual supuestamente se habían quedado a dormir.

Pero claro que no tenía miedo, porque sabía que estaba con su oso, y tras unos cuantos parpadeos habita reconocido inmediatamente la habitación que compartía con su alfa, así como la gran y cómoda cama de su pareja.

No sabía en qué momento su oso los había cambiado, pero definitivamente estaba feliz de estar en la cómoda cama, aunque claro, tampoco le habría molestado despertar en el granero considerando que Yoongi lo había arreglado especialmente para él, por su cita.

Un tierno sonrojó cubrió los mofletes del adorable chico cuando recordó todas las cosas que habían hecho durante la noche, porque ninguno de los dos había quedado satisfecho con probar el cuerpo del contrario solo una vez.

Jimin todavía podía recordar cómo se había sentido tocar el cuerpo de su alfa, sentir su peso sobre el suyo, su calor, y definitivamente, no podía olvidar lo bien que se había sentido cuando lo había llenado con su cosita.

Había sido un tanto extraño al principio, y un poco doloroso, pero nada que unos dulces besos y lindas palabras no pudieran arreglar, y fue mucho mejor cuando lo hicieron por segunda vez.

Minnie también había deseado una tercera, pero su oso solo le había sonreído amorosamente entre respiraciones inestables y le había besado con dulzura, prometiéndole que otro día podrían volver a repetirlo, pero que no era bueno abusar de su cuerpo, mucho menos siendo su primera vez.

En ese momento Jimin no había entendido mucho sus palabras, él realmente se había sentido bien, mucho mejor que bien en realidad.

Bueno, tal vez se había sentido un poquito cansado y su cuello, donde su alfa le había mordido, había estado muy sensible, en especial porque parecía ser un lugar que su pareja no dejaba de tocar y besar.

Pero estaba bien, según lo que le había explicado Jin y Yoongi, aquella mordedura significaba que su unión ya había sido completada y oficialmente era la pareja de su oso, así como su alfa era el suyo y de nadie más.

Cuando Yoongi le había mordido, Minnie había sentido una cosa rara en su pechito y cabeza, pero no le importó mucho cuando sintió como si una cuerda invisible lo juntara con su oso y de pronto, sentimientos que no eran suyos, llenos de calidez y alegría habían invadido su pequeño cuerpo.

Había estado muy confundido en ese momento, y su rostro debió de reflejarlo porque su oso le sonrió dulcemente y le explicó del enlace que se había formado entre ellos, donde ambos podían sentir los sentimientos del otro y con un poco de esfuerzo y tiempo, hasta podrían hablar en la mente del otro.

Eso había entusiasmado a Minnie, y Yoongi aprovechó ese momento para distraerle y explicarle sobre ese enlace entre ellos, haciéndole olvidar que deseaba una tercera ronda.

No es que estuviera particularmente molesto, su alfa sabía lo que era mejor para él después de todo, y le había prometido que otro día podían volver a intentarlo.

Y si no fuera porque su trasero le dolía un poco, Jimin en ese mismo instante habría atacado a su alfa exigiéndole que cumpliera con lo prometido aprovechando que había despertado primero, pero estaba bien, ya habría más días para ello.

Sintiendo un suave ronquido sobre su cabeza, Minnie sonrió dulce e intentó echarse un poco hacia atrás para poder observar a su pareja.

Claro, que primero tuvo que luchar un poco con el fuerte abrazo que apresaba su cintura y las piernas enredadas con las suyas, antes de finalmente lograr una pequeña distancia para admirar el rostro de su Yoongi.

🌼Cutie Pie🌼Donde viven las historias. Descúbrelo ahora