🌼Capítulo 37🌼

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Oscuro.

No importaba cuántas veces Minnie parpadeara o pasara sus manos por sus ojos, simplemente no lograba observar absolutamente nada sin importar donde mirara.

No sabía cuánto tiempo había transcurrido tampoco, por lo que no tenía ni idea si el sol ya había salido a iluminar el cielo y era el lugar en el que se encontraba encerrado el que estaba oscuro o ya era de noche y por ello había menos luz, dándole ese aire tenebroso a la habitación en la cual se encontraba.

Si se concentraba un poco en sus otros sentidos, Jimin sabía que estaban en una especie de cabaña, a juzgar de la madera ruda y áspera bajo sus manos, que se encontraba tanto en las paredes como en el suelo.

No estaba solo tampoco, sus sensibles orejitas peludas habían capturado algo de ruido fuera de la habitación, así como también la respiración suave y casi superficial de otras personas, quienes parecían hacer todo lo posible por aparentar no estar ahí.

El omega lo entendía en realidad, él tampoco quería estar ahí, deseaba estar con su oso Yoongi, su pareja, quería que este le rodeara con sus brazos y le prometiera que todo estaría bien mientras besaba su frente.

Abrazándose así mismo, un pequeño sollozo escapó de sus labios al recordar a su pareja, ¿sería verdad lo que le dijo Ji-Seok tras abandonarle en aquel lugar?

¿Yoongi pensaría que lo había dejado por su propia cuenta porque no le quería y no lo buscaría por ello?

Pero su oso le había dicho que lo amaba antes de morderlo, y Minnie le había respondido.

Si se amaban y querían tanto, era obvio que su oso saldría a buscarlo si no lo veía ¿cierto? No lo abandonaría.

No le dejaría solito como su madre, su alfa se lo había prometido.

Cuando la puerta se abrió repentinamente, todos en el interior pegaron un pequeño brinco y tomaron una rápida inhalación asustada antes de contener su respiración.

Jimin se quejó y colocó sus manos sobre su rostro cuando la luz que apareció repentinamente, le alumbró directamente a los ojos, cegándolo por unos minutos.

Tras reconocer la figura parada en la puerta, el pequeño omega inmediatamente bajó su rostro y se escondió entre sus piernas.

—No intentes esconderte de mí, mocoso —gruñó una conocida voz mientras se internaba en la habitación, con las tablas quejándose bajo su peso en cada paso.

Jimin soltó un pequeño quejido de dolor cuando su cabello fue tomado en un brusco agarre y luego su cabeza jalada hacia atrás para contemplar a la persona que lo trataba mal.

—Tío —pronunció con dolor.

—¿Me extrañaste, fenómeno? —sonrió con maldad.

El pequeño hombrecito arrugó inmediatamente su nariz ante aquel nombre.

—Minnie no fenómeno, fenómeno mala palabra —expresó alzando sus manos para intentar liberar su cabello.

—Uhm... Parece que te crecieron un poco de agallas estando con ese torpe oso —comentó divertido.

—¡Oso no torpe! ¡Yoongi inteligente y quiere a Minnie! —exclamó enojado, enterrando sus garras en la mano del alfa.

Un sonidito sorprendido escapó de su garganta cuando su tío alzó su mano y le abofeteó el rostro con tal fuerza que le giró su cabeza, haciendo que el sonido hiciera eco en la habitación.

—Que te crecieran las bolas no significa que ahora me puedes hablar como quieras, idiota —gruñó con enojo, consiguiendo que las otras personas en la habitación chillaran asustadas y se apegaran más a las paredes, alejándose de ellos.

🌼Cutie Pie🌼Donde viven las historias. Descúbrelo ahora