Virus Omega [EN EDICIÓN]

Capítulo 24

—Creo...que ya es hora de dejarlos tomar el control de nuevo. —Se observan a los ojos, y saben que las palabras de JiJi tienen razón.

Había estado demasiado tiempo la parte animal sobre la humana. No había nada malo en ello, que ellos supieran, pero sabían que a Jimin y YoonGi no les vendría bien. Es entonces como, con toda la pesar del mundo, el omega se abrazó a MinGi, manteniéndolo cerca y disfrutando de su eterna calidez contra su piel.

—Por suerte, esta vez podremos comunicarnos por el lazo. —Intenta tranquilizar el rubio, sabía que era un momento complicado para ambos, se extrañaban, les dolía tenerse lejos, por eso se sentían mucho más tranquilos ahora que sus humanos habían aceptado el cortejo. Que se evitaran o no aceptaran sus sentimientos les dolía.

—No te dejaré en paz. —Murmura con una pequeña risa el mayor, abrazando la pequeña cintura de su pareja.

—Solo recuerda explicarle todo a YoonGi, ¿si? Ambos estarán igual de confundidos y asustados al ver la mordida. Yoon debe lamer y curar la marca por al menos dos días si no quiere que nos duela, debe cicatrizar.

—Claro, omega, no dejaremos que les lastime. Esperemos que no se lo tomen tan mal. —Ambos se mantienen en silencio unos segundos, simplemente disfrutando de sus presencias, escuchando sus calmadas respiraciones e inhalando sus aromas.

No fue necesario despedirse en esta ocasión, y de tal forma en la que se encontraban, abrazados, les otorgaron el control a sus partes humanas. Sus ojos volviendo al color natural, pestañando varias veces, intentando asimilar sus consientes y lo que había ocurrido.

Jimin se abstiene a avergonzarse por estar tan pegado a su hyung, solo se despega lentamente mientras asimila que está en su cuerpo nuevamente. 

Min parece ser el primero en recordar todo, separándose entonces un poco del menor en su regazo. Su mirada se dirigió directamente hasta su cuello descubierto, asustándose un poco con lo que veía. Eran justo dos marcas algo profundas, como las de un vampiro que absorbía tu sangre. Incluso podía verse un poco de esta queriendo sobresalir. Aquello lo descolocó por completo, ¿él había hecho eso? ¿MinGi? ¿Había lastimado a su omega?

Pero antes de que pudiera decir algo al respecto, la mano de Park fue con rapidez a cubrir su nueva marca, quizás impactando demasiado fuerte, lo que le sacó un gemido lastimero de dolor. Observó su palma, teniendo pocos rastros de sangre manchándola, probablemente alterándolo.

—Hyung, ¿q-qué...?

—No te desesperes ni asustes, Jimin. —Fue su lobo quien decidió hablar primero. —Es algo normal entre los lobos marcar a tu pareja. La mordida que nos hizo MinGi es tan solo temporal, es una marca de aroma que espanta a los alfas y te sentirás tranquilo con el aroma de YoonGi. También pueden comunicarse a través del lazo, pero no es muy fuerte la conexión.

Jimin intentó asimilar las palabras que su lobo le explicaba. Probablemente la palabra que más se sostuvo en su cabeza fue temporal, pero luego las demás palabras lo confortaron un poco. Era...¿una especie de muestra de amor?