Capítulo 2

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Con suaves caricias comenzó a removerse, sentía que era hora de despertar pero el sueño seguía apoderándose de su sistema. No quería levantarse, no quería enfrentarse a un nuevo y torturoso día. Pero cada uno de sus pensamientos fueron detenidos abruptamente gracias a una suave voz que acarició su cuello enviándole una corriente eléctrica por toda su espalda.

—Despierta ya, es algo tarde —susurra sin detener las caricias sobre los cabellos rubios, el menor disfrutaba de aquello y se acomodó mejor sobre el pecho de Min.

—Mh, ¿no será posible dormir un poquitito más? —Pregunta con un pequeño mohín abriendo apenas sus ojos pequeños.

—Claro, pero será tu problema tomar tu desayuno frío después —con esas palabras, Jimin se levantó de un salto sintiéndose rápidamente mareado por la acción repentina—. ¿Estás bien? ¿Te duele algo?

—Siento que aquella inyección me ha hecho más vulnerable, no lo sé, aún conservo revoltijos en mi estómago y pequeños dolores en mi abdomen.

—Yo creo que eso es normal, no creo que aparezcan unos ovarios y útero de la nada, o que te los hayan trasplantado —suelta, caminando hacia el comedor tomando al contrario de la mano para guiarlo, le preocupaba un poco su estado.

—Sí, tienes razón —tuerce sus labios sentándose para degustar las tostadas, té y jugo que su hyung había hecho especialmente para él—. ¿Tú ya comiste? —Pregunta mientras le ponía un poco de dulce a el pan, llevándoselo a su boca para degustar y alimentarse. Después de todo, en el Área habían días completos en los que no comía, y si les daban era comida enlatada o cosas poco saludables para su organismo que no le brindaban nada a su cuerpo. Sino estaban los días donde eran inyectados simplemente por vitaminas, no sentían hambre pero sabía que no sería bueno para él aquello tan constante.

—Sí, ya he comido un poco. Me levanté demasiado temprano la verdad, no asimilo que estés aquí, aquí en frente mío desayunando como si nada apenas despierto.

Y aquí era hora de hacerse una pregunta, ¿cuánto tiempo duraría YoonGi en no traer sus sentimientos de años pasados a flote? Los momentos que tuvieron, absolutamente todo lo bueno y malo que afrontaron juntos. ¿Cuánto tiempo debería pasar? ¿Cuánto, antes de dudar entre JungKook y Jimin?

—Debes comenzar a creerlo, como yo lo haré sabiendo que no estoy más en esas cuatro paredes llenas de científicos y doctores —mostró una sonrisa sincera y allí el azabache asintió, simplemente con la mirada baja reteniéndose por dentro, acercándose a la salida de la cocina.

—Yo...iré a bañarme así cuando termines vas tú y podemos salir un rato para que te despejes, ¿si? —Consulta sin voltear a verlo.

—Claro, gracias hyung —y sin más, YoonGi desapareció yendo directamente hacia el baño para tomar una ducha y que él mismo pudiera despejarse de sus pensamientos, porque estaba comenzando a enloquecer con ese niño merodeando por su casa. Después de todo, sí continuaba siendo el mismo Jimin feliz, más allá de lo que haya pasado, siempre le regalaba de sus hermosas sonrisas que sólo él podía darle.

Park terminó su desayuno riendo por lo bajo. Bien...¿qué se pondría? No tenía ropa, sólo aquella ropa vieja y desgastada que de milagro le dejaban usar en ocasiones en el Área 51. Aunque realmente usar la ropa de su hyung no le cabía para nada como una mala idea. Siempre había disfrutado hacerlo, sentir su particular aroma en cada prenda le hacía sentir especial.

Se preguntaba de sobre manera del nuevo novio de YoonGi, incluso le pareció cómico pensar por unos segundos que ahora tenía dos parejas, pero prácticamente era algo triste de que él ya haya sido cambiado. Tanto tiempo que le había costado confesarse...que no le correspondiera hasta luego de meses en los que se habían distanciado. Su pequeña historia de amor había sido un milagro, y él había estado muy agradecido de que por fin pudiera ser novio de Min. Pero al parecer lo bueno le duró muy poco, pues cuando fue secuestrado, no volvió a verlo nunca más.

Virus Omega [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora