Me mordí la piel del labio inferior sin darme cuenta, moviendo la pierna con frenesí. Ni quisiera le estaba mirando la cara, la pared parecía más importante en ese momento mientras intentaba regular mi respiración.
Roxy tenía mucha paciencia conmigo. La había llamado hace cuatro días, justo cuando llegue a casa después de llevar a Milo al veterinario. Myah no había parado de insistir desde que me había lastimado la mano, y Rob estaba de su lado.
Pero yo estaba agotada. De verdad. La cabeza me dolía todo el día, sentía la necesidad de tomarme medicamentos todo el tiempo para relajarme.
Había vivido en una pequeña nube las primeras semanas que pase aquí. Había dejado de beber alcohol en exceso, podía dormir en las noches y había dejado de morderme las uñas. Pero ahora, de repente, me sentía diferente de nuevo.
No sabía que había pasado. No lo entendía. Estaba bien y como si fuere obra de arte, por un sueño, había decaído.
—Cuentame que pasó el otro día, Sam. Dijiste que tuviste un sueño...¿De qué tipo?
Negué con la cabeza pasándome la manga de la sudadera por la nariz.
—Era raro. Había muchas cadenas y candados, y puertas— intenté recordar todo lo posible, mientras comenzaba a sentir la pierna cansada de tanto moverla—; también había telas colgando del techo. Después entre en una habitación y...
Me calle. No me gustaba decirlo en voz alta. Sólo conté tres veces en mi vida con lujo de detalles lo que me había pasado. La primera, a la policía, cuando tuve que declarar. Pero esa vez tenía a mi padre al lado agarrándome la mano.
La segunda, en las redes sociales. No sabía porque lo había hecho, y hasta el día de hoy me arrepentía. Supongo que sentí la necesidad de dar lujo de detalles para que la gente me creyera, pero también rompí una línea de privacidad que me separaba a mí y a mí vida privada de la gente desconocida e entrometida.
La tercera, y última, fue a mí psicológica de Oregón. Se lo conté de a poco, incluyendo pequeños detalles en cada sesión. Nunca fue directo, no me habría atrevido, pero sabía que Lexie había entendido por completo mi historia.
—¿Y que pasó?
Mire a Roxy. Ella no era Lexie...a veces extrañaba hablar sin terminar la frase y que ella me entendiera, sinceramente.
Volví a negar con la cabeza.
—Me vi a mi misma- me encogí de hombros —; no quiero hablar de esa parte.
Roxy asintió compresiva, anotando algo en su libreta. Me volví a morder el labio mientras ella levantaba la cabeza de nuevo.
—¿Y quieres contarme lo que pasó después, cuando te despertaste?
—Eso ya lo sabes. Le pegue al espejo.
—Si, eso lo sé, pero no sé qué sentimiento te llevo a hacerlo.
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Si te perdono| Robert Pattinson. (Instagram #2)
RomanceSegunda parte de Instagram. Después de dos años de lo sucedido Samay decide tomarse un año sabático para poder decidir que carrera estudiar, pero en sus planes se mete su mejor amiga a cambiarle un poco el rumbo de sus ideas. Unas vacaciones en Los...