En "Mi vida en tu mirada", Emily lucha por despejar su mente y encontrar respuestas a sus sentimientos mientras regresa a Londres con su madre y Olivia, dos semanas después de abandonar el hospital. La sombra de Leon, su "prometido", se cierne sobre...
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Con el corazón en la boca, conduzco mi auto lo más rápido posible, intentando llegar al destino en el que tengo la esperanza de encontrar con bien a Emily. Las lágrimas me traicionan y no me dejan ver bien, mientras siento que me muero por dentro, al imaginar muchos escenarios en los cuales mi alma está a merced de la maldad de Jessica.
Revisé el GPS de mi auto y bajé la velocidad, notando inmediatamente que me encuentro en una zona muy antigua y peligrosa de Munich, un escalofrío recorre todo mi cuerpo por el terror que estoy sintiendo. Una voz me sorprendió dentro de mi auto y se trata del GPS.
«Has llegado a tu destino»
Detuve el auto, sin importarme el hecho de que lo más probable es que dentro de unos minutos, lo encuentre desmantelado por la zona en la que me encuentro. La cual, definitivamente, está llena de gente de muy mal vivir. Me bajé y miré a mi alrededor intentando encontrar a Jessica o a alguien que me de alguna razón del paradero de Emily.
—Cállate y camina hacia adelante, ni se te ocurra hacer algo estúpido, porque no dudaré en dispararte y no tengo que decirte lo que le haremos a Emily. —sentí un frío helado en la sien y una milésima de segundo después, noté que se trata del cañón de una pistola.
Levanté las manos en señal de rendición y caminé hacia adelante, tal cual me lo indicó la voz masculina que ahora me apunta en la cabeza con un arma. Me puso una bolsa de tela oscura en la cabeza y me obligó a caminar, luego me subió a lo que parece ser un auto y todo se oscureció cuando sentí un olor muy fuerte.
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La puerta se abrió revelando a dos hombres que me inspiraron muchísimo miedo, retrocedí inmediatamente e intenté alejarme de ellos.
Su apariencia es muy desaliñada y podría decirse que se ven muy descuidados. Los dos son muy parecidos y hasta parecen hermanos, miden cerca de dos metros y lo sé porque tuvieron que agacharse un poco para poder pasar por la puerta. Su tez es pálida y todo su cuerpo está lleno de tatuajes que no puedo reconocer, por la oscuridad del lugar y también porque parece que sus cuerpos fueron usados como lienzos para intentar cubrir con tinta, la cantidad de cicatrices que hay en ellos.
