¡Boyfriends!

23

Kazutora rogó mi perdón, el cuál no dudé en dárselo, todos nos adentramos a mi casa y los chicos no dudaron en invadir la sala y la cocina.

Les pedí que me esperaran unos momentos pues queria bañarme, ellos aceptaron y me aseguraron que todo estaría bien, claramente no debía creerles pero lo hice.

Cuando sali de bañarme, escuché algunos gritos y simplemente negué mientras soltaba un suspiró, ¿Aun podía echarlos a dormir en el patio, cierto?

-¡Hally, ayuda!- grito Draken desde la cocina, por lo que fui rápidamente.

Cuando entre a esta una de las pantuflas de Baji impactó justo en la pared a un lado de mi.

-¡Te dije que ese era mi pan!- grito Baji que estaba siendo sostenido por Draken, Chifuyu y Takemicchi, siendo este último el causante de mi risa, estaba aferrado a sus piernas pero aun así Baji lo movía de forma brusca.

-¡Todo es culpa de Mikey!- gritó Kazutora desde la otra esquina, lo mas alejado del pelinegro.

-¿Yo qué?- preguntó el mencionado asomándose un poco por la puerta de forma inocente.

-¡No culpes al enano diabólico, Tú te comiste mi pan!- afirmó Baji tomando la escoba que estaba cerca de él.

-¡No Baji, baja la escoba!- grito Draken tratando de tomar el objeto en cuestión.

Aun que claramente Draken había pedido mi ayuda, no estaba interesada en hacerlo, al contrario me estaba divirtiendo mucho la situación.
Pero termine resignandome al momento de observarlo y ver su cara de suplica.

-¡Vamos, ven!- alentó Kazutora tomando el trapeador -¡Puedo resistir!

-No, no puedes, baja eso- le asegure acercandome para quitárselo -¿Me pueden explicar que esta pasando exactamente?

-Kazutora se comió el último pan que claramente había dicho que era mío- hablo Baji dejando de forcejear.

-¡Te fuiste y lo dejaste sólo, yo tenía hambre!- se excusó Tora mientras hacía movimientos raros con sus manos.

Solte un suspiró y me acerque al pelinegro tranquilamente, le indique a los chicos que podían soltarlo y aun que dudaron un poco terminaron accediendo.

-Vayamos por mas, no pasa nada- lo tomé de la mano mientras tomaba mi cartera -¿Quieren algo?

Pregunte en general pero todos negaron diciendo que aun tenían suficientes cosas como para pedir algo más.

Mientras caminabamos se había formado un silencio cómodo, Baji tenia una sonrisa de oreja a oreja mostrando sus colmillos, aun que me pareció extraño no le tome importancia suponía que simplemente estaba demasiado feliz o había tomado alguna pastilla de dudosa procedencia patrocinadas por Sanzu.

-Me recuerda a los viejos tiempos- voltee a verlo curiosa -Siempre fuimos nosotros tres normalmente.

-¿Te refieres a cuando eramos mas pequeños?- hice un poco de memoria al ver como Baji asentía tranquilamente.

Ciertamente eramos un trío demasiado hiperactivo y comúnmente terminabamos metidos en lios los cuales la madre de Baji terminaba resolviendo.

-¡Los tres mosqueteros!- grito Kazutora una vez había llegado a lo mas alto del árbol, siendo observando por Baji y por mi.

-¿Que cosas dices ahora?- preguntó Baji curioso, volteando a verme a lo cual simplemente negué, tampoco entendía muy bien.

-Somos inseparables y siempre nos apoyamos- empezó a explicar el chico mientras se acomodaba para no caer -Creo que somos como ellos.