Manos Ensangrentadas © (COMPLETA✔️)

Capítulo 14.

14. Asesinos

«A veces
una simple flor,
puede estar
escondiendo
muchas cosas»

Hoy era el día, el día de revelarlo todo, sin dejar nada, contarlo todo, absolutamente todo.

-Entonces Sheila, cuénteme todo... -Esa era la señal, la señal de soltarlo todo. Por fin...

Bien, tome un largo suspiro y decidí responder a esa pregunta, que obviamente no me devolvería la misma respuesta tranquila que yo le estaba dando.

-Quizas el otro dia no le conte todo muy bien... -estaba dudando si en hablar o no: -. Se que nos quedamos en la parte de Liam, el puente y eso... Pero... -no sabía como seguir y George pareció entenderme.

-Empieza por lo que menos te duela y termina con lo mas difícil, querida. -George me dio unos extraños ánimos.

-Esta bien. -le asentí -. Lo que menos me dolió desde que todo esto comenzó fue...

Se me formó un nudo en la garganta, y no encontré esa palabra, ese nombre...
<<¿Por qué no podia decir su nombre? ¿Por qué sentía este nudo en mí garganta? ¿Qué me pasaba?>> Dudé, pero decidí soltarlo:

-Liam... -hice una pausa y lo observé, pensativa, y aún así, hablé con el nudo formado en mi garganta -. Pero después se convirtió en lo que más me duele.

-Entiendo, pero, ¿Por qué? -parecía estar un poco confundido, aunque George no conocía a Liam, solo sabía un poco sobre él, solo eso. Además, lo poco que él conocía fue la historia del puente.

-Yo... Él quiso ser... Algo más...y yo no estaba preparada...yo... -no sabía si decía la verdad. Estuve hablando parando en cada palabra, pues estaba nerviosa, con al algo de migraña.

¿No estaba preparada? ¿O... Si lo estaba?

<< Sí lo estas Sheila >>

Lo estaba. Sí lo estaba. Estaba preparada para una relación, y además con un chico tan agradable como Liam. Pero...Claro, sin olvidar los obstáculos que la vida me ponía. Jaison era el mayor obstáculo que la vida me puso, y que hasta ahora no había podido saltar.

-Sheila, quiero que lo cuentes todo -, observó el reloj en su muñeca, exigiendo, pero de una forma racional -. Antes de que el tiempo acabe. -una nota de amabilidad se posó en su voz, haciéndome por fin, soltarlo todo.

-Si -

-¿Qué pasó en el puente? -me interrumpió.

¿Qué, que pasó en el puente? Una locura George, una simple locura. Hice una afable pausa, ok, tenía que hablar ya, esto se comenzaba a poner... Raro. Decidí responder:

-Después de que Liam escuchara mi voz bajo aquel puente, no dudo en bajar a ver qué sucedía, pero Jaison, al darse cuenta de que Liam bajaba en nuestra dirección, me dijo que lo moleria a golpes por interrumpirnos, Jaison quería quedarse y enfrentarlo, pero yo le juré que si se quedaba ahí, me suicidaría, prácticamente lo chantaje con mi vida. Sé que fui un poco exagerada con lo del suicidio, pero no se me ocurrió otra cosa en aquel momento tan tensante y aterrador para mí. Fue, quizás, uno de los peores momentos de mi vida -me miré las manos, intentando ver sus raíces, por si decían algo sobre mi futuro, algo diferente, pero solo encontré una M en ellas, como todos los demás. -. Entonces, Jaison se escondió detrás de unos arbustos que habían a un lado del puente, y justo en ese instante, Liam llegó a mí. Me pregunto si estaba bien, y que hacía allí, y muchas cosas más, sentía la pesada mirada de Jaison en nosotros. Después de todos eso, Liam me llevó a casa, y me dió ánimos, como si yo estuviera luchando contra un monstruo y los necesitara. Y así fue, los necesite, a cada uno de ellos. Solo podía confiar en Emma, mamá, y Lia-