La dama del tenis

Capítulo 22

En el club de tenis

Tezuka está buscando a su hermana pero no la encuentra por ningún lado y va hacia Ryuzaki.

—Ryuzaki-sensei ¿Has visto a mi hermana?—pregunta Kunimitsu algo preocupado—Momoshiro me dijo que hoy no le tocaba limpieza a Aoi, no sé donde puede estar—.

—Aoi-chan, está ocupada. Parece que quiere perfeccionar una técnica y me pidió permiso para saltarse los entrenamientos—sonríe Ryuzaki.

—Comprendo...ahora que lo pienso, no ha parado de ver videos grabados de partidos de tenis y todo lo que pone en la televisión e incluso los de la radio—.

—Bueno, cuando lo termine seguro que te sorprenderá—Ryuzaki se ríe y Tezuka lo mira con interrogación.

Aoi está en la casa de Ryoma y toma aire.

—De acuerdo, se acabó el calentamiento. Veamos cuánto has mejorado—Nanjiro le dice y hace un saque, Aoi lo devuelve sin problemas y ahora es cuando abre bien los ojos. Observa que el bicep se tensa y como al tocar la raqueta con la pelota, crea una rotación hacia la izquierda pero la pelota parece que va a la derecha.

—Lo veo, esa pelota va a la izquierda—Aoi grita y golpea a la pelota cuando cambia de dirección pero no calcula el tiempo y la pelota sale afuera.

—Muy bien, has adivinado a donde iba a ir la pelota. Lo malo que tienes que mejorar la reacción—sonríe Nanjiro—Es impresionante, aprende muy rápido...solo ha tenido un par de semanas y ya puede leerme. Solo debe conseguir reaccionar más rápido.

Empieza un peloteo donde Aoi adivina las pelotas e incluso poco a poco, a la vez que van pasando las horas, va sabiendo que jugadas va a realizar Nanjiro y se adelanta a ellas.

—¿Cómo? ¿Cómo sabias que pensaba usar un tiro con efecto?—pregunta Nanjiro.

—Tus músculos, ya estaban preparados para cuando llegara la pelota. Solo tuve que bloquear el tiro—indica y Nanjiro se ríe a carcajadas.

—Eres increíble. Durante toda estas horas me has estudiado y ya puedes me puedes predecir sin que yo lo haya pensado de antemano. No tenía intención de usar un tiro con efecto...ni lo había pensado, pero inconscientemente iba hacerlo—se ríe—Es muy bueno, muy bueno. Ahora ya sí que sí, eres imposible de engañar. Aoi-chan, añade a este tenis, el de datos y entonces tu porcentaje de error en adivinar será inferior al 0.1%—.

—¡Sí!—grita de forma afirmativa con una sonrisa.

—También te recomiendo, que juegues mucho usando tus ojos hasta que empieces hacerlo inconscientemente.Sino, puedes llegar a convertir esto, en tu forma de jugar y sería una pena, ya que tu tenis es muy divertido y hace que tenga ganas de jugar durante horas porque es alocado. Es como volver a la infancia—ríe a carcajadas.

—A mí me dicen que mi tenis, provoca desesperación—Aoi dice con sorpresa.

—Tu tenis es divertido, pero la gente que juega al tenis solo para ganar lo ve como desesperación, aquellos que jueguen porque aman el tenis, lo notarán divertido—le responde y Aoi sonríe—¿Por qué crees que hay gente que sigue jugando al tenis contigo durante horas?—.

Aoi se queda pensativa y luego se pone a sonreir con fuerza—¡Tienes razón! ¡Muchas gracias por enseñarme!—.

—No hay de que, no hay de que. La vieja tenía razón al decirme que eras muy buena—indica.

—Es verdad, muchas gracias por conseguir que Ryuzaki-sensei me dejara venir estos días—agradece.

—No es nada, no es nada. Ahora vete, sino recuerdo mal, mañana es la semifinal y la final del Torneo Regional—mueve la mano para espantarla.

—Adiós, Nanjiro-sensei—Aoi se despide con la mano y se marcha a casa.

—Ahora, Aoi-chan. ¿Cómo haras para mezclar esa habilidad en tu juego? ¿Cómo evolucionarán tus técnicas a partir de ahora? Que divertido es esto—Nanjiro se pregunta con una sonrisa.

Al llegar, Aoi observa a su hermano que la espera.

—¿Has conseguido dominar dicha técnica?—pregunta Tezuka.

—Sí, ¿Quieres verla?—pregunta con ojos brillantes.

—Aunque mañana haya torneo, quiero verla—responde Kunimitsu y los dos salen al jardín y colocan la red y empieza el peloteo.

Al cabo del rato, Kunimitsu mira a su hermana con seriedad.

—Aoi...¿Cómo puedes adivinar mis jugadas? Sobretodo antes de que pueda pasar por mi cabeza ¿Tenis de datos?—pregunta Kunimitsu.

—No, solo veo y escucho a tus músculos. Ellos son lo que me dicen que piensas usar, ya que ellos no mienten—responde con una sonrisa.

—Ya veo, entonces jugaré en serio—Tezuka dice y al final Aoi pierde contra su hermano.

—¡No es justo, sabes mis puntos débiles!s—e queja.

—Si quisieras ganar fuerza en tus brazos, serías invencible. Mientras tanto, la falta de fuerza será tu debilidad—camina a dentro de la casa y Aoi le saca la lengua.

—Eres malo, Nii-chan—se queja—Deberías dejarme ganar—.

Kunimitsu sube a su cuarto y se sienta en la cama–5-7...poco a poco me va alcanzando. Mi hermana es una jugadora prodigiosa de tenis. Ni Ryoma podría con ella.

Sonríe y mira al techo mientras siente orgullo de su hermana pequeña. Pero luego pone una mirada de preocupación —A este ritmo, puede llegar a darse cuenta de lo prodiogiosa que es y parecerle el tenis aburrido...tengo que conseguir que se habra al mundo...entonces...podrá explotar todo lo que quiera—.