Capítulo 15

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Acaba de terminar el torneo clasificatorio de distritos. Faltan 4 semanas para que empiece el torneo clasificatorio de Tokio. Un Domingo, Inoue se encuentra tranquilamente en su oficina redactando un artículo cuando observa que le llama un número de teléfono.

—¿Quién es?—pregunta.

—Hola, Inoue-san. Soy Aoi Tezuka. Le pedí tu número de teléfono a la entrenadora Ryuzaki—escucha la voz de Aoi que está bastante alegre.

—Oh, Aoi-chan ¿Sucede algo para que me hayas llamado?—pregunta con una sonrisa.

—Sí, me he apuntado a un torneo de tenis femenino que hay hoy. Cuando el mini torneo del Seigaku, me dijiste que querías verme jugar al tenis, hoy puede ser el gran día—sonríe—Claro está, si no tienes nada que hacer—.

—No, no ¿Dónde es el torneo?—pregunta con una sonrisa, mientras prepara la cámara y la libreta para tomar apuntes. Cuelga al rato y cuando se va hacia la puerta, observa a Saori que entra por la puerta.

—Inoue-sempai, ¿Vas algún sitio?—pregunta.

—Sí, toma la cámara. Nos vamos a ver un torneo de tenis—sonríe con ilusión.

—¿Eh?—mira con interrogación.

—Es de tenis femenino y va a jugar Aoi Tezuka—sonríe—Si vienes, vas a ver porque estoy tan emocionado.

—Oh, claro. La hermana pequeña de Tezuka debe ser igual de buena que su hermano—se va con su sempai.

—¿Igual? Ella es mucho mejor—responde con una sonrisa.

Mientras en las pistas de tenis.

—Hemos llegado a tiempo—Horio dice mientras toma aire.

—El capitán, nos pidió que viéramos el partido de Aoi-sempai—indica Katsuo, el chico rapado del grupo.

—Momo-sempai dice que ella es muy buena. Veamos si es verdad—Horio indica con curiosidad.

—Chicos—escuchan que les llaman y al girarse, observan a Aoi-sempai con la misma equipación de titular del Seigaku pero con una falda en vez de un pantalón. Tiene el pelo recogido y usa una gorra blanca y azul.

—Aoi-sempai—la nombran.

—Mi hermano os mandó venir para grabar mis partidos ¿No?—sonríe con emoción.

—Sí—asiente Kachiro—Nos dijo que vendría para la final—.

—Estupendo—responde con voz cantarina—Voy a apuntarme, nos vemos.

Se despide con la mano y junto a su mochila de tenis que es de color azul oscuro con una cabeza de lobo, en lateral, gruñendo.

Aoi se apunta al torneo y observa en que pista le toca y contra quién jugará—No sé como empezar.¿Qué los partidos duren cuatro minutos o dejar que la rival golpee la pelota y que los partidos sean largos?—se pregunta con curiosidad.

Mientras piensa se pone a golpear la pelota con la parte lateral de la raqueta, sin mirar y camina hacia la llave del torneo. Los de primero abren la boca a ver el control de la pelota con la raqueta de tenis, observa que le tocaría enfrentarse a seis jugadoras para luego jugar la final.

—Ya sé como hacerlo—sonríe Aoi.

Aoi va a su pista y observa a su rival, una chica de unos 15 años de cabello negro, corto y ojos marrones.

—Hemos llegado a tiempo, menos mal—los tres de primero se giran y observan a Inue-sempai y a Saori.

—Inoue-san, Saori-san, ¿También habéis venido a ver a Aoi-sempai?—pregunta Horio con curiosidad.

La dama del tenisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora