AFRODITA
Ayer hubo partido en el que nos fue bastante bien, hicimos un gran trabajo en equipo.
El que no acertó ninguna fue Havertz.
Me duele, le cogí tanta confianza, que me duele que esté así... pero hablé con papá y me pidió que le dejase que él mismo vendrá...solo espero que no esté equivocado.
Otro punto importante y que jode mis días es Mason Mount. No entiendo nada de lo que dijo cuando le conté sobre Kai, "dale espacio" o "déjalo".
Yo veo que mi amigo está mal y no le podría dar espacio. Dos días...hasta tres, más no.
Eso sería de mal amigo.
Kai está pidiendo ayuda a gritos. Pero nadie se había preocupado por él y cuando lo quiero escuchar e intentar ayudarlo, se cierra.
—¿Se puede?—pregunta Mason cuando ya está dentro.
Al principio me preguntaba si lo hacía queriendo y le gustaba amargarme pero no...él es así.
—Ya has entrado—digo negando con la cabeza.
Estaba tranquila organizando la semana pero definitivamente le gusta joderme.
—Si quieres nos vamos—dice y escucho risitas. Levanto mi cabeza para mirarlo y me encuentro con que ¿Declan Rice?
¿Qué hace este aquí?
—Sí...mejor—habla Rice con una sonrisita.
—No...vamos... Afrodita, ya hablamos de lo sucedido la otra semana. No nos trates así—se acerca a donde estoy y se inclina sonriendo travieso—He traído a Dec para que lo conozcas.
—Yo no recuerdo decirte que quiero conocer a Rice—digo sin apartarle la mirada, bufa y miro a Declan que esta riéndose—Sin ofender.
—Da igual, no ofendes. El que quería conocerte soy yo—confiesa sonriendo.
¿Otro Mason? Todo el día sonriendo.
—No coquetees con ella, capullo—murmura Mount—Quería invitarte a que pases la tarde-noche con nosotros. Llevas todo el día aquí seguramente y metí gol ayer, me lo debes.
Y sí...mi vida es una mierda. Sólo una cosa le pedí al universo...una cosa...obviamente, no se me ha concedido.
Ahora tendré que aceptar esa cita si no quiero quedar mal, pero claro...a mí nunca me ha gustado quedar bien.
—No puedo. Ya tengo planes—rechazo y cuando Mount me mira un poco triste algo me hace sentirme mal.
Rice sólo mira a Mount.
No lo he rechazado porque no quiera, viene Alex y es verdad que tengo planes.
—Mmm no pasa nada, otra día será ¿no? Y así nos conocemos—propone Declan.
—Sí...un gusto conocerte—le sonrío—Por cierto...¿qué haces aquí?—alza las cejas—Digo eres de otro equipo y estás en las instalaciones del Chelsea...tu equipo no lo verá bien ¿no?
—Nadie lo sabe y nadie lo ha visto, solo me ha acompañado porque se me había olvidado mi móvil—dice rápidamente Mason.
—Como sea—sacudo la cabeza. En realidad, no me importa.
—La promesa sigue en pie.
—¿Qué promesa?—pregunto haciéndome la tonta.
Me mira mal y Declan suelta una carcajada.