De Vuelta Al Pasado

8. El siguiente Black y un rayito de sol.

Un encapuchado caminaba hacia el centro con una pequeña encapuchada que daba saltitos alrededor de el.

— sunshine, por favor quedate quieta en un solo lugar— le decía el encapuchado a la pequeña que no se estaba quieta.

— está bien, Ori— dijo la voz angelical de la nena.

— bien, hola viejitos rejuvenecidos— dijo quitándose la capucha dejando ver a un Sirius Black más guapo y joven— soy Orión Black, por lo visto hasta el momento el siguiente y último varón de la noble casa de los Black.

Lo último lo dijo con burla,Sirius estaba en shock, el se iba a casar.

— tu no puedes ser mi hijo— dijo convencido negando con la cabeza— yo soy un alma libre, sin ataduras ni amores.

— pues padre, por lo que dice mi madre si soy tu hijo— le dió una sonrisa ladeada— si se que todos estarán pensando ¿Cómo es posible que pueda ser tan guapo?

— tu no eres guapo— interrumpió la pequeña — eres sexy.

Todo el comedor quedo en silencio, ¿quien podría haberle enseñado palabras así a esa pequeña niña?

— permítanme interrumpir mi presentación para prestar atención a esta pequeña— se agachó junto a la encapuchada— ¿quien te enseño esa palabra, sunshine?

En la mesa de los encapuchados una pelirroja moría de vergüenza, mientras que una rubia luchaba por no romper en carcajadas.

— juro que no volveré a hablar de esas cosas delante de una niña de cuatro años— decía la pelirroja.

En el centro del salón el chico pelinegro aguardaba la respuesta junto a la pequeña.

— no puedo, es un secreto— dijo tapando la boca con sus manitas.

— conmigo no debes tener secretos, Sunshine— le dijo con una media sonrisa

"juro que lo matare" pensaba la pelirroja desde la mesa.

— de acuerdo, Nique dice que tú no eres guapo, dice que eres sexy y muy, muy ardien...—Orion le tapo la boca a la pequeña.

— bien, creo que tu madre no volverá a dejarte con Nique— dijo cargando a la pequeña— por otro lado me alegra saber que pienses de esa manera de mi, pelirroja.

— cállate y sigue tu presentación — grito alguien desde la mesa de los encapuchados— después hablamos.

— después hablamos— le recordo— seguimos viejitos rejuvenecidos, mi nombre ya lo dije y el apellido de mi madre lo diré al final, cuando fui a Hogwarts mi casa fue....¡SLYTHERIN!

Sirius aplaudió, el no iba a ser la persona que le dijera a su hijo que no podía estar en cierta casa, el había roto la tradición quedando en Gryffindor, obviamente la casa de Slytherin aplaudió.

— gracias por esa muestra de afecto, cuando estuve en Hogwarts mis asignaturas favoritas fueron DCAO e historia de la magia para dormir, gracias a Merlin, Morgana, Dumbledore y todos los grandes magos no fui prefecto ni premio anual, creo que no soportaban mi sentido del humor y por eso pasaba en detension— dijo provocando risas en todo el comedor, Sirius tuvo una idea de a que se refería con sentido del humor y le sonrió orgulloso— mis padrinos son Harry Potter y su esposa... Quien tampoco diré su nombre.

— ¿me case? No, mejor ¿Sobreviví a Voldemort?— pregunto el chico.

— claro que sobreviviste, Harry— dijo la castaña— ¿o como crees que nos hicimos cargo de Teddy?

El azabache se encogió de hombros y la castaña coloco lo ojos en blanco.

— bien, si no hay más interrupciones, creo que puedo continuar—dijo rodando los ojos— tengo veinticuatro años, y ahora mismo trabajo como modelo en el mundo Muggle,no tengo novia pero tengo a alguien en la mira, antes creía que no me daba ni la hora, pero ahora creo que tengo esperanzas.