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SPAM TIME: Por si no lo sabían tengo una nueva historia omegaverse la cual me encantaría que leyeran! Le puse ganas y hasta me puse rolas sad para escribir jsjsjsj disfrute escribirla por lo que quiero saber si les gusta las historias omegaverse para escribir y subir el montón que tengo en mi computadora ^^

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Después de que tomo la droga, Samuel sintió un extraño calor viajar por su cuerpo y caer en su vientre, había sentido este calor antes con anteriores drogas.
Su cara se cubrió por un débil sonrojo que fue notado por ambos licántropos.

Mark carraspeo desviando la mirada apenado de sus propios pensamientos al contrario de su hermano que mantenía un rostro imperturbable que uno nunca podría imaginar que compartía los mismos pensamientos lascivos.

Samuel fue llevado a su habitación seguido de ambos hombres, la cara normalmente pálida del chico tenía algo de color en sus mejillas, miró de reojo a ambos licántropos pero en especial de quien estaba a su lado izquierdo, tal vez era por el calor que le generaba la droga pero realmente quería jalar a Mark dentro de su habitación para poder terminar con lo que habían estado prolongando desde hace rato.

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Con la cabeza en las nubes se quedó mirando como Mark sostenía una jeringa, ya tenía algunos días en los que seguía la misma rutina una vez despertaba, bebería sangre y después Mark le daría la medicina.

Acostumbrado a él procedimiento, cerró dulcemente sus ojos y abrió la boca dejando ver su lengua rosada, sintió un leve piquete en ella el cual desapareció tan rápido abrió los ojos y encontrarse con él atractivo rostro del licántropo.

Cuando Mark quiso alejarse, noto que al vampiro sostenía el borde de su camisa y lo miraba a los ojos pidiendo algo.

Al estar solos, a Mark no le importó actuar de forma más intima con el pelirrojo y agachó la cabeza para juntar sus labios con los de samuel quien sin dudar abrió su boca para dejar pasar la lengua del hombre.

Sus lenguas se entrelazaron y danzaron a un ritmo lento, las cejas del vampiro se crisparon cuando Mark atrapó su lengua y la succiono, las manos de Samuel acariciaron el cabello más que a gusto de lo que el licántropo hacia con su lengua.

Cuando se separaron, el rostro de ambos tenía color en especial el de Mark quien su rostro estaba sonrojado de una forma muy linda y combinado al calor que sentía Samuel se le hacia muy difícil contenerse de querer ser sometido por el hombre delante suyo.

Cuando salió de sus pensamientos sintió como el licántropo lamia su cuello y dejaba besos en este para luego acercarse a susurrar algo.

—Vamos a mi habitación —El cálido aliento chocó contra su oreja causando cosquillas, el pelirrojo asintió dejando un último beso en los labios rosados de Mark.

Antes de decir algo más Mark tomo la mano del chico y ambos salieron dirigiéndose a la habitación del hombre lobo.

Mark se sentó en la cama y ayudó al vampiro a sentarse sobre sus piernas, las manos del pelirrojo se posaron sobre los hombros de Mark y se volvieron a besar con aún más intensidad que antes, mordidas y lamidas cayeron sobre los labios del licántropo, vaya que a Samuel le encantaba morder los dulces labios hasta dejarlos rojos y sangrando para después lamerlos deleitándose de la sangre ocasionando jadeos de parte del hombre bajo suyo quien no se quedó atrás y bajo sus manos hasta el trasero del chico.

El primero en alejarse fue Samuel haciendo se cabello hacia atrás y arrodillandose en el piso para abrir el pantalón de Mark y tomar la erección entre sus labios, causando que un escalofrió recorriera el cuerpo del hombre lobo, la polla del hombre fue tragada por el vampiro quien movió su cabeza de arriba a bajo, Mark no podía apartar la mirada de lo que hacía Samuel, ver como esos delgados labios recorrían su miembro hasta crear sonidos obscenos y de succión, el pelirrojo también se encontraba excitado de ser visto por lo que sacó todo el falo de su boca y sacó su rosada y húmeda lengua para lamer el glande del hombre como si de su paleta favorita se tratara, sus blancas manos tomaron los testículos del licántropo y los masajeo al tanto que sus labios tomaban el glande y lo chupaba, Mark se dejó caer en la cama y con ambas manos tomó la parte trasera de la cabeza de Samuel quien al darse cuenta de esto abrió lo más que pudo su boca para que el mayor follara su boca a su gusto, naturalmente lágrimas comenzaron a salir de sus ojos y mojaron sus pestañas dándole dándole aspecto lastimero y más cuando aquella verga lograba llegar hasta su garganta, la cara del vampiro se volvió un desastre rápidamente de lágrimas y saliva pero eso solo excitó a ambos a seguir con la ruda mamada y así después de varias embestidas el rostro rojo de Samuel quedo enterrado entre la entrepierna de Mark sintiendo como los vellos públicos del hombre picaban contra su nariz y entonces se vio obligado a beber el semen caliente que descendía a su garganta directamente.

Tu asquerosa sangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora