My Love in your Shadows [Miraculous Ladybug]

Prólogo

ChatNoir:
Era una noche lluviosa, iluminada únicamente por los rayos, a momentos, mientras que el sonido de los truenos ensordecía los oídos de la ciudad.

—¡Amuleto encantado!—dijo Ladybug, y pude ver la desesperación en sus ojos, mientras observaba a su alrededor, y al objeto—Vamos... vamos... ¡Maldición! No sé qué hacer.

—Dos cabezas piensan mejor que una, M'Lady—le dije, mientras me acercaba a ella, y alcancé a divisar que se trataba de una enorme lona, y noté que el agua no pasaba a través de la misma—Es a prueba de agua. Podríamos atrapar a Acuaxe en ella, y quitarle el Miraculous.

—Tienes razón, es el único objeto que no se transforma en agua. ¡Ahí tiene que estar el akuma!—miró a su alrededor, y esta vez, vi esa sonrisa dibujarse en su rostro—¡Lo tengo!

Sabía que un plan surgiría en esa brillante cabecita, Bogaboo.

—Es más poderoso porque está usando el Miraculous, pero el akuma solo le deja escoger un elemento—comenté—Gracias al cielo, que no se le ocurrió escoger el fuego.

—El Miraculous del dragón es peligroso, debemos recuperarlo, lo antes posible.

—Al igual que todos los demás.

Ejecútanos el plan de Ladybug, y logramos purificar el akuma.

—¡El primer Miraculous!—dijo M'Lady, emocionada.

—Te dije que lo lograríamos—dije, y le regalé una sonrisa.

—¡Jamás podría haberlo logrado sin ti!—dijo, mientras me abrazaba con fuerza—Bien hecho, gatito.

—Bien hecho, M'Lady—dije, y me permití acariciar su cabello.

De repente, sentí un fuerte golpe en mi cabeza, haciendo que todo mi mundo se volviese negro, de repente.

Ladybug:
Sentí como Chat se desplomó, haciendo que mi rostro saliera de su refugio, el cual, era el pecho de mi querido Chat, al mismo tiempo que sentí como el Miraculous del dragón era arrebatado de mi mano, una vez más...

Ese felino se había quedado a mi lado, aún después de todos mis rechazos, mis mentiras, mi indiferencia... a pesar de todo, seguía ahí, peleando a mi lado, y ofreciéndome su hombro para que llorara en él cuando lo necesitase, no podía abandonarlo.

Me tiré al suelo, y lo tomé entre mis brazos, para luego, arrastrarlo hasta un rincón, en donde, según yo, estaría a salvo, hasta que despertase. Chequé sus signos vitales, y noté que su pulso estaba un poco débil, pero aún respiraba, casi con normalidad.

Me puse en posición de alerta, y busqué en la oscuridad de aquel callejón desierto qué o quién se había atrevido a golpear al héroe de París. Muchos lo llamaban tonto por seguir a mi lado, después de ver el desastre que realmente era yo. La mayoría de los parisinos estaban decepcionados de Ladybug, y ¿cómo culparlos? Yo también estaba tremendamente decepcionada de mí misma.

—¿Quién está ahí?—dije, creando un escudo con mi yo-yo, y protegiendo a mi compañero, quien aún se encontraba inconsciente—¡Muestra tu cara, cobarde!

—Muestra la tuya, primero—me dijo una voz que no alcancé a reconocer, y la chica se acercó a mí—Mi misión es asegurarme de que no se pierda el Miraculous del dragón, pero ahora mismo, me sería tan fácil arrebatarte el tuyo, y el de ChatNoir, aún más.

Finalmente, pude distinguir su silueta enmascarada, en medio de la oscuridad, y los tonos naranja de su traje la delataban.

—Volpina—dije, mientras cerraba mi puño con rabia—¿Dónde metiste el akuma esta vez? ¿En tu collar falso?