Capítulo 34

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Cuatro meses después...

Adrien:
Marinette y Bridgette se llevaban muy bien, y se la pasaban jugando en el parque infantil que yo había instalado para mi joven cuñada, y también para mi hijo. Marinette y yo estábamos muy felices de saber que seríamos padres de un varón, pero yo mantenía su embarazo en secreto, por su propia seguridad, y la de mi hijo. Habíamos decidido que el bebé se llamaba Louis, y Marinette ya había confeccionado mantas, ropa, y accesorios para él, hasta que tuviese, al menos, un año.

Mi prometida creaba arte con sus manos, y también había hecho unos cuantos juguetes, y adornos para su cuarto. La otra noche, encontré la puerta de su estudio abierta, y vi que había dejado su libreta de diseños encima del escritorio. Morí de la ternura al ver que también había diseñado los muebles, con medidas y todo, al igual que el orden en el que todos estarían en la habitación de Louis, y hablo en serio cuando digo que tenía la ubicación exacta de cada artículo.

Decidí tomarle foto al orden, y a los planos de los muebles. Los había mandado a hacer, los diseños, colores, y medidas específicas de los diseños de Marinette, y estarían listos en una semana. Por lo pronto, habíamos decidido ponernos manos a la obra, y pintar el cuarto de Louis de azul. Tom, Sabine, Alya, Nino y yo, pintamos las paredes en dos días, mientras que Mari nos observaba sentada, mientras Brid usaba acuarelas para pintar su vientre, con sus pequeños deditos.

Nos encontrábamos parados frente al resultado final, y yo acariciaba su crecido vientre. Estaba casi seguro de que nuestro bebé llegaría en dos meses, si todo salía bien.

—¿Crees que le guste?—preguntó Mari, pensativa, mientras observaba las paredes azules, con el techo, y los detalles en yeso blancos, con un suelo de mármol perfectamente blanco, con algunos detalles en gris claro.

—Le encantará—dije, y besé su frente—y no te preocupes por los muebles, de eso me encargo yo.

—Pero... yo.

—Creo que deberías tomarte un descanso de los diseños, ¿o planeas diseñar y fabricar también los muebles?—dije, un poco serio, para no arruinar la sorpresa que le tenía al final de la semana.

Los muebles de Louis sí serían diseñados por ella, pero quería que eso fuera una sorpresa...

—Vale—dijo, un poco desanimada, mientras alzaba los hombros.

—¿Irás con Brid?

—Sí, ¿quieres venir?—me regaló una sonrisa, y extendió su mano.

—Vamos—dije, luego de tomarla, y caminar a su lado, pero el sonido de mi celular nos interrumpió—Es del trabajo.

—Me adelantaré con Brid y mis padres, tú atiende a esa llamada—besó mi mejilla, y se marchó.

Marinette:
Había doblado la esquina del pasillo, pero escuché lo que Adrien decía en el teléfono, y un mal presentimiento se instaló en mi pecho.

—¿Hola, señor?... ¿Tú? ¿Qué mierda quieres? ¿Qué haces con el celular de tu padre?... Estás mintiendo, solo quieres hacer que vaya a verte, y no lo haré... Priscilla, tienes que madurar y entender que no es no... ¡Deja de jugar con eso! ¿Acaso no te importa nada?... Ten por seguro que le preguntaré a los demás, a ti no te creo ni los buenos días... ¡Adiós!

Priscilla... ese nombre me daba vueltas en la cabeza... odiaba con todas mis fuerzas a esa mujer, ¿y cómo no hacerlo? Me humilló, y aún sigue intentando quitarme a mi marido. ¡Jamás se lo voy a permitir!

Regresé hasta el punto en donde se encontraba Adrien, y lo observé con firmeza, ante lo cual, él se mostraba confundido, y estuve a punto de preguntarle qué había pasado, pero el sonido de su celular nos interrumpió, otra vez.

My Love in your Shadows [Miraculous Ladybug]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora