My Love in your Shadows [Miraculous Ladybug]

Capítulo Extra (Bono)🔞❤️

Marinette:
Nos habíamos puesto más sentimentales de lo normal, pero aún podía sentir el extremo calor que fluía entre los dos. Comenzamos a besarnos de nuevo, y esta vez, enrollé mis brazos en su cuello, y lo sentí tomar mi trasero. Di un pequeño salto, y como esperaba, me atrapó entre sus brazos, y yo enrollé mis piernas en su cintura. Sentí que mi espalda golpeó suavemente contra una de las paredes, y los brazos de Adrien iban subiendo mi cuerpo, lentamente.

—Apoya tus piernas en mis hombros—me ordenó, y yo aún me encontraba algo confundida.

—¿Qué planeas hacer?—pregunté, con curiosidad.

—Llevarte a un delicioso orgasmo—respondió, y besó mi vientre—Vamos, haz lo que te digo, será interesante—me bajó, y susurró en mi oído—Sé que no te pusiste ropa interior, mi niña traviesa.

—O-ohw—gemí, y sentí que me subía una vez más.

—Vamos, princesa, muero por comerte—dijo su voz ronca, e inmediatamente entendí cuál sería su siguiente movimiento.

Sonreí ante la idea, y monté mis piernas en sus hombros, quedando sentada casi en su cara.

—Eso es, princesa—dijo, y besó la cara interna de mi muslo.

La falda de este vestido era realmente corta, y realmente, la había diseñado única y exclusivamente para este tipo de ocasiones. Sonreí con picardía al darme cuenta de lo bien que mi novio había aprendido a conocerme.

—Levanta tu falda—me ordenó, y yo obedecí.

Adrien enterró su cabeza entre mis piernas, las cuales, temblaban al sentir su respiración contra mi excitado sexo.

—Puedes soltar la falda—habló, y yo gemí al sentir una lamida suya—Relájate, y disfruta.

Enterró su rostro contra mi vagina, y sentí su lengua entrar en mí, rozando mis sensibles nervios que allí se encontraban. Su boca chupaba sin piedad, y sus manos apretaban mis glúteos, y me daba nalgadas, mientras extraía todo fluido que de mí emanaba.

—¡Ush! Amo ese trasero...

—¡Ahhh!—grité, al sentir como su lengua masajeaba mi clítoris, mientras metía u sacaba dos de sus dedos dentro de mí—¡Joder! No puedo más—gemí, y él aumentó la presión de su cara contra mi sexo.

Mi cuerpo se retorcía. Mis piernas se estiraron, y los dedos de mis pies se doblaron hacia adentro. Me vi obligada a tirar mi cabeza hacia atrás, mientras mi cuerpo se arqueaba, y cerré mis ojos para distinguir los rayos y centellas que veía en esos momentos.

—Aaaaadrien, sigue, no pares—gemí, y pegué un grito aún más fuerte cuando me sentí estallar en su rostro.

Lo sentí soltar una risita, y dejó su cabeza bajo mi falda por un corto rato... ¿Acaso me estaba mirando como latía?

—¿Por qué me miras tanto?—pregunté, desde arriba, un poco apenada.

Él salió de donde se encontraba, y me bajó lentamente, para luego, sentarme en la mesa de su escritorio. Sus húmedos labios se acercaron a los míos, dejando un tierno beso en ellos, y pude notar que el lazo de su cuello se había caído en algún momento.

—Porque eres hermosa—habló, finalmente—Y amo cada parte de ti, me excita ver lo que puedo llegar a provocar en ti, y déjame decirte, Bugaboo, eso que hay entre tus piernas es una obra de arte... es como una droga, a la cual, soy adicto.

Yo sonreí, y desabotoné su camisa, para luego, quitársela, y fijar mi atención en el cierre de su pantalón, el cual, abrí sin problema alguno, antes de responderle.