11

208 34 9
                                    

La misión resultó victoriosa pero aún así se habían perdido demasiadas vidas como para celebrar. Por primera vez habían ganado a los titanes pero por supuesto que la ciudad había quedado con severos daños y aun había muchos cadaveres que mover a la hoguera. Un día había pasado y ni siquiera eso había sido suficiente para poder levantarlos todos.

- ¿Estás cansada? -pregunta Armin sentándose junto a _____.

Podía notarse en su mirada que no había dormido en toda la noche al igual que todos los demas. Se mantenía apartada del resto como si algo aún la consternara, como si no pudiera estar tranquila con ella misma. Pero aquella expresión se suaviza al ver al rubio a su lado.

- Si, demasiado... y las raciones de comida no me llenaron para nada -dice mirada su barra de cereal- y sabe a mierda.

- Puedes comer mi racion si quieres, yo no tengo hambre -Armin miente pero sin pensarlo le extiende su comida.

- Eres muy dulce, pero lo siento, no puedo aceptarla, es para ti. Come, te hace falta luego de todo lo que hiciste ayer -le dedica una pequeña sonrisa.

- ¿Yo? Lo único que hice fue... utilizar mis palabras.

- He ideaste planes maravillosos Armin. Yo... realmente admiro tu inteligencia y en como te desempeñas en literalmente todo. Deja de quitarte mérito.

- ¿De verdad crees eso? -las mejillas del rubio se ruborizan ligeramente pero la oscuridad lo encubria.

Ella se acerca un poco más al muchacho para así poder recostar su cabeza en su hombro así como hacia cada vez que tenía oportunidad, aprovechaba esos momentos para tener cercanía a el. Por otro lado, Armin se ponía muy nervioso aunque solo era contacto mínimo. Voltea ligeramente su rostro para apreciar una expresión más calmada por parte de la peliblanca.

- Lo siento -se disculpa la chica al percatarse de la mirada de Armin e intenta levantarse pero la mano del chico se posa sobre la suya.

- No, no, no me molesta, tranquila -le dice Armin sonriendole- Puedes quedarte así -quita su mano avergonzado.

- Te preocupas mucho -ella ríe.

- No quiero ponerte incomoda o faltarte el respeto -se pone rojo.

_____ comienza a sentir sus ojos pesados y las ganas de dormir la invadieron a pesar de que la noche anterior no habían hecho aparición. Era como si estar con el rubio le diera toda la paz del mundo, la que necesitó todo este tiempo. Se sentía tan calmada que pudo dormir casi instantáneamente después de que el chico se animara a acariciar su cabello.

Armin hizo igual, también cayó dormido a los pocos minutos después que ella. El de igual forma se tranquilizó al tener a alguien con el, y no se trataba de cualquier persona, era _____, la chica con la que mantenía una bonita amistad pero la cual lo hacía dudar de si realmente solo la veía como una amiga o quizá era un interés amoroso también. Pero no pensaba mucho en eso.

Y así, los jóvenes cadetes durmieron plácidamente toda la noche.

[...]

Otro día comenzaba, el segundo después de todo el desastre ocurrido y parecía ser más triste que el otro. No se diferenciaba nada al día de ayer. El llanto desconsolado de muchos soldados podían oírse por las calles, todos sufriendo por tener que ver a sus compañeros muertos en batalla. Y era más terrible aún ver el estado en el que todos se encontraban: algunos les faltaban las extremidades de sus cuerpos, despedazados por las bestias, etc.

_____ había hecho la mirada gorda a soldados como Marco Bodt, sin ganas de observar y recordar.

- ¿Acaso es... humano todo esto? -habla _____ mientras bajaba por un momento el pañuelo que le cubría la boca.

The Only Option (Armin Arlet)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora