Muéstrame los colmillos y dime que me amas (Beastars)(Legoshi y tu)

94. Face off

"____________"

No me importó el que me vieran de nuevo, de hecho podía decir que quería que estuvieran acostumbrados a verme, pero eso no era lo importante. Esta vez sentía como el camino a su casa se volvió más corto que las otras veces que regrese de la misma manera a la escuela, pero notaba algo que no me percate anteriormente... la cuidad a pesar del fuerte sol de la tarde de verano y el frío se comenzaba a disipar, la cuidad se me hizo pequeña a mis ojos desde el aire. He elevado mi vuelo y mi respiración podía sentirla pesada al igual que mis pulmones en mi pecho, sin embargo, no me robo la atención de lo que era Louis. 

Poco sabía del área que abarcaba la mansión del venado, pero pude ubicar nuevamente el balcón donde siempre tenía nuestras conversaciones, sin pasar alto el hecho de que no debían de verme. De solo un impulso del mismo suelo logré llegar, sin hacer ruido en mis pisadas como si de mi presa se tratara y lo era. 

No había más que solo la sala que también recordaba a la perfección y eso no me servia en estos momentos. Recuerdo esos días, la primera vez que vine a fuerza por Ibuki, nuestra plática incomoda. También el día de la cena, donde tuve la oportunidad de matarlo, pero no pude... o más bien por idiota no quise, casi pierdo mi vida por un agujero en mi cráneo vestida ya en un vestido negro provocativo. No pude seguir recordando, trataba de encontrar algo que me pudiera servir.

Sé que soy fuerte, pero 30 leones me superan por completo, aún pudiendo escapar en el aire, no quitaba el hecho de que llagarían a dispararme y morir. Podía escuchar a lo lejos sus mismas voces, como se estuvieran entrando apenas a la casa. No podía encontrar a lo que hablaban, pero no me podía quedar en ese lugar, al menos si no quería que me vieran en ese lugar. Poco a poco me dirigí a la puerta y poder estar al pendiente si se aproximaban y salí. 

Las únicas dos veces de venir fueron suficientes para poder conocer la casa, sin embargo no me ayudaba del todo el no tener algo para poder defenderme y sin poder pensar un momento en que hacer, aún sintiendo la necesidad de estar aquí. La habitación era pequeña, pero tenia una ventana grande reflejando un escritorio grande, varios papeles y unas libreras al lado.

Me acerqué al escritorio y comencé en mi búsqueda de algo que me serviría, en los cajones habían más papeles y más papeles. Había algo que no me convencía del todo, no estaba viendo algo que no me permitía ver lo que necesitaba. Todos los cajones estaban llenos, pero de tratarse de un jefe de la mafia como él no solo eran papeles. Moví los papeles y en uno de ellos estaba una pedazo de madera bajo los mismos y la vi. No sabía de que clase era la pistola en mis manos, pero si brillaba, era pesada pero la podía tomar en manos sin problemas y la podía mover sin sentir que mis manos se quedaban tiesas ante su metal. 

No sabía si estaba cargada, ya que no sabía como sacar el cartucho de esta, pero si de algo estaba segura, es que  podía sentir los seis gramos de peso extra y oler el metal de las balas. Un gramo, una bala, tenía seis balas en mi poder y una o tal vez todos las quería ver el pecho de Louis. El uniforme de la escuela no traía bolsillos más que solo el cinturón y no había más opción que mis manos, pero debía de idear un plan para saber que luego de conseguir el arma. 

Sin embargo, tampoco pude ver más que los papeles del escritorio luego de poner los demás dentro de los cajones. Las gráficas eran precisas, no eran complicadas y mostraban varios números, número altos donde eran claras las ganancias que tenía la casa 'Shi'. No era de esperarse que ellos no tuvieran una gran cantidad de dinero. Al parecer el distribuir la seguridad por el barrio donde se encuentra el mercado negro al igual que las inversiones en las tiendas de carne como en el servicio a los demás, son el efecto de sus beneficios. 

─No crees que ya has leído suficiente─ su voz era divertida que no causo más una corriente de adrenalina mucho más alta que a un principio ─Levanta las manos y ven conmigo, al jefe le gustará tu visita o tal vez, me recompense por haberte matado, aún cuando esta enamorado de ti, le haré un enorme favor─ dijo revelandero secreto que Louis me podía ocultar 

¿Enamorado de mí? 

Ahora entiendo su despecho hacía mi y el hecho de hacerme querer perder todo. 

Camine hacia Free sin levantar las manos, dando pasos grandes y seguros, las alas plegadas y lista para poder contraatacar. Estaba segura de que un disparo saldría y sería mío.

─Dije que levantes las manos─ esta vez más enojado 

─O tal vez bajar la mirada─ 

Lo hice caer derribandolo con mis pies, pude escuchar como su arma cayó al piso y la necesitaba, pero tomó mis pies caí con él. Me di la vuelta y le cree una nueva cicatriz en rostro mientras golpee sus costillas derechas. me lo quite de encima para alejarme, sin embargo, no fue suficiente para que se detuviera, pero ya era tarde. De pie junto a mis dos manos puestas con ambas armas. 

Sus manos estaban arriba, me veía de manera fulminante.

─No eres capaz...─ dijo serio 

─¿De verdad?─ dijo quitando el seguro de las pistolas 

─Sé que no podrás, no has matado nadie─ 

El sabor de la sangre de Jiyu, estaba presente en mi poca, comenzaba a calentarme el hecho de solo querer comer carne, quería saborearla de verdad, sentir como saciaba mis deseos. Ojala pudiera compartir este sentimiento tan bello junto a Legoshi. 

─Si tan solo supieras─ 

Fue donde su mirada se lleno de miedo y piedad por que le perdonara la vida y una chispa por parte de las pistolas al igual que un ruido se escucho por todo el lugar. 

(...)

"Louis"

Veía el agujero en la pared, era profundo pero al mismo tiempo preciso, como si no hubiera querido matarlo con una segunda bala. Su herida de igual manera estaba cerca de ser parte de su cuello, pero termino en su clavícula. Nuevamente, no tenía la intención de matarlo. ¿Cúal era entonces?

─Se encuentra bien jefe, esta fuera de peligro─ dijo Ibuki entrando a la habitación 

─Bien, tráemela, quiero hablar con ella─

─C-Claro jefe─ sabía que sería su reacción, estoy acostumbrado que siempre cuestione mis decisiones que ponen en riesgo mi vida 

La adentraron por la puerta, dos de ellos estaban en sus hombros y otros dos desde su espalda sujetando sus alas. Se retorcía del dolor y jadeaba y gemía del mismo, estaba de rodillas, me veía con odio aún con los ojos suaves y sin importar de su cuerpo lastimado. Si bien la quería conmigo, aún sabía que a los perros, se les debe de domesticar. 

─Me esperaba tu visita... no necesariamente hoy, pero si la esperaba─ aún sin decir nada, solo sus ojos ─Suéltenla─

Todos me vieron con sorpresa y como se podía ver como me llamaban loco por dentro de sus cerebros. No podía del todo estar seguro que me mataría, pero sabiendo que tenía varios golpes, no sería del todo capaz que lo hiciera, además, todos están afuera de la puerta, solo esperando a que hiciera el movimiento.  Sería la bala en su cabeza la que paro en el hombro de Free. 

─Siéntate─ le pedí de forma seria pero no tan seca ─Sé porqué estas aquí, no quiero incomodarte o juzgarte pero no entiendo el...─ pero mi palabra se interpuso en la mía 

─¿Qué carajos ganas con decirle?─ dijo enojada ─¿Qué carajos ganas con decirle sobre lo que tengo con Legoshi cuando era mi obligación hacerlo?─ dijo casi llorando 

─Nada, solo... hacerte ver lo que puedes ganar─ dije colocando la pistola al lado mío