Dulces sueños [Aizawa Shouta]

Capítulo 15

Capítulo 15: Buenas vibraciones

POV omnisciente

Ya hemos hablado de Shouta Aizawa, ¿me equivoco? Hablé de su absurda obsesión con la lógica: "no necesito más que mis gelatinas, Mic, sirven de sustituto", "el pelo no me molesta, Midnight, cuando lo haga, me lo cortaré"... Hace las cosas casi por supervivencia, con estar vivo y cumplir su función parecía bastarle.

Bueno, pues con el sexo era igual.

Una relación romántica implicaba sentimientos, los sentimientos, dolor... No, una relación romántica era una pérdida de tiempo. 

Pero Shouta se veía sometido a sus impulsos sexuales y, como casi todo el mundo, tenía que satisfacer dichas necesidades.

Sí, ya lo sé, podría hacerse pajas hasta quedarse seco y así no perdería tiempo, pero él quería más, quería vivir esa experiencia... Shouta había sido dominado por el libido.

Ahora bien, si no quería una pareja seria, ¿cómo tendría relaciones? No pensaba ir a un prostíbulo, le resultaba inmoral.

Podría hacer como otras muchas personas y tener relaciones esporádicas con gente que conociera de fiesta o por la red, pero ello querría decir que tendría que socializar y no estaba muy dispuesto a ello.

La única persona que tenía un conocimiento del mundo del sexo y lo decía abiertamente que él conociese era Midnight, así que fue a ella a quien pidió ayuda, tragándose su orgullo.

—Oh... Ya veo, nuestro pequeño Shouta se ha hecho mayor—. Se burló la heroína, dando vueltas alrededor del profesor, estudiándolo.

—Kayama, por favor, tómatelo un poco más en serio.

—Así que has decidido dejar de ser virgen a los 21 añitos, ¿eh?

—Déjalo, no tendría que haberte dicho nada, joder, me voy.

—No, no, ni se te ocurra... A ver, dime, ¿qué buscas exactamente en el sexo?

Como podréis suponer, Shouta no tenía ni idea de qué responderle, no estaba seguro de nada y así se lo confesó a su amiga que, lejos de desalentarse, se emocionó.

—Entonces sé exactamente qué hacer...

Dudo que os sorprenda saber que la heroína no apta para menores de dieciocho practicaba el BDSM*, por lo que sé descubrió ese mundo a base de lecturas eróticas y algún que otro podcast durante su adolescencia.

Midnight llevó a Shouta a un club de swingers*, donde él se hizo a una idea de lo que buscaba, fue allí donde Aizawa inició su vida sexual y donde se aficionó, como su amiga, al BDSM.

Siguió con estas prácticas hasta los veinticinco, cuando la guerra paralizó su vida. La pérdida de un ojo y una pierna hizo que las inseguridades proliferaran y no se atrevió a volver. Tampoco es que fuera mucho en ese periodo de tiempo, ya que el cierre de la academia y el cuidado de Eri le quitaban un tiempo que ni siquiera tenía.

Resumiendo, Shouta nunca había tenido una relación seria y, además, llevaba años de sequía.

Después de todo, de que la lógica se escapase de entre sus dedos, Shouta deseaba comenzar una relación con su ex alumna, a la que ahora consideraba su amiga, aunque, por supuesto, querría que eso no fuese así durante mucho tiempo.

Pero había un detalle que impedía que diese el paso y se declarase.

¿Estaría ella de acuerdo en tener ese tipo de relaciones sexuales? ¿En llevar a cabo esas prácticas?