Capítulo 34

945 94 20
                                    

Capítulo 34: El coma.

Punto de vista de Mina.

—No entiendo nada, Mina, ¿me estás diciendo que solo por inyectarle una droga ha entrado en coma? El resto de personas no han acabado tan graves—. Se sorprendió Shinsou—. ¿Una reacción alérgica puede provocar algo así?

Ya era lunes y el héroe acababa de enterarse del estado de TN, había estado ocupado redactando los informes necesarios para volver a Tokio y no había utilizado el teléfono hasta ese día.

O al menos eso había dicho él, conociéndolo, más que por trabajo, probablemente fue por querer ignorar al mundo. Así era él, muy asocial.

No lo culpaba cada persona es diferente y tiene sus gustos, yo disfruto de socializar, él no y TN... Bueno, dependía del momento. A pesar de ello no negaría que estaba molesta, no tanto por el hecho de que no me contestara, sino por el contenido que trataba de transmitirle.

—No es solo por la reacción alérgica, eso fue lo primero que le contaron los médicos a Aizawa porque tenía un sarpullido por todo el cuerpo. Después le dijeron tuvo una sobredosis—. Continué explicando.

—¿Una sobredosis por una inyección? ¿Por qué le pasa eso a ella y al resto no?

—Resulta que la concentración era extremadamente fuerte en su inyección, ha entrado a quirófano dos veces en tres días, pero según parece ya está algo mejor, más estable.

—¿Qué tal Aizawa y Recovery?

—Mal—. Contesté con sinceridad—. Aizawa está destrozado, lleva durmiendo en el hospital desde la noche del viernes y Recovery no está mejor, pero al menos sale del hospital, parece estar siendo la más fuerte de los dos.

—Mina, tenemos que irnos—. Me avisó Eijiro.

—Tengo que dejarte, Shinsou, Kiri y yo vamos a recoger a Eri, volvía hoy de un campamento y todavía no sabe nada, no querían preocuparla, pero se suponía que iban a ir todos a la playa de vacaciones, así que no tardará en hacer preguntas, nos han dicho que la llevemos al hospital con su padre.

—Pobre, mañana ya estaré por allí, puedo ir con Eri a algún lado para distraerla... Se suponía que debería estar allí desde el sábado, pero mi novio tuvo que irse a Fukushima por una reunión de trabajo el jueves y me lo dijo en el último momento, así que tuve que hacer también su maleta... Y pensar que fue el último drama que le conté a TN...

—Hablas como si estuviera muerta, idiota...— Lo reprendí.

—Mina—. Insistió Kirishima ya al lado de la puerta.

Me despedí antes de colgar y fui con él.

Se cumplió una semana del ingreso de mi mejor amiga en el hospital y la situación no había mejorado, la habían vuelto a operar por una recaída, Aizawa me había repetido los términos médicos que le había dicho una médica, pero para ser sincera no entendí nada y en cuanto terminó la llamada olvidé lo que me había dicho.

Se suponía que volvía a estar estable, aunque lo cierto es que aquel término había perdido significado después de aquella última operación.

Eri dormía en nuestra casa, cuando íbamos de camino al hospital con ella fue cuando TN entró a quirófano por última vez, así que nos encargamos nosotros de explicarle que la novia de su padre estaba enferma.

—¿Y no podemos visitarla? A mí me gustaba que fuesen a verme al hospital.

—Me temo que no, pequeña, TN no quiere contagiarte—. Mintió Eijiro.

Dulces sueños [Aizawa Shouta]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora