AMOR ESCRITO CON SANGRE (PRIMER LIBRO DE LA SAGA AES)

48. ¿Padre? (Maratón 1/3)

- ¿Padre? ¿Me estás jodiendo?- cuestione acercándome más a los intrusos.

Estaba preocupada por el sujeto que se le acercaba a Mike, pero al mismo tiempo confundida por lo que acaba de escuchar.

-Padrastro - corrigió T con enojo- ¿Por qué estás aquí? Estás arriesgado toda nuestra misión- exclamó molesto.

Padrastro... Estoy peor que en el comienzo, no entiendo.

- Hey tú, no toque a Mike- me acerqué de inmediato cuando note que el desconocido se sentó en la cama.

Sus ojos era una mezcla de miel con verde, dejo salir sus feromonas y por instante sentí que no me podía mover.

- Tú eres la que no se debe acercar- me advirtió.

Sentí que todos mis instintos de supervivencia se colocaron alerta, este tipo estaba buscando que me alejara, pero coloque toda mi resistencia para no dar un paso hacia atrás.

- Tu madre sintió que algo no iba bien, me mandó a qué supervisará - alcance a escuchar detrás de mí.

¿Madre? No entiendo nada, ¿A quién se refiere? Si Massimo es su padrastro, ¿Quién es su padre verdadero o madre?

- Melek deja a Alaia y tú T deja de molestar a papá- pidió K tratando calmar a todos en la habitación.

Melek dejo de utilizar sus feromonas en mí que olían a coco, de inmediato me acerqué a Mike para colocar distancia entre el desconocido y mi amigo.

- Él no es mi papá- señaló T enojado- Vete de aquí- exigió este a Massimo.

Massimo agarro del brazo a T, desaparecieron sin más.

- ¿Qué diablos pasan entre esos?- cuestione tratando de evitar que Mike se acercará al desconocido.

K apretó los ojos y se jaló el cabello estresado.

- Tengo que ir tras ellos, no puedo dejar que creen problemas, Melek no te muevas de aquí- pidió K antes de desaparecer también.

El desconocido se quitó la capucha de su chaqueta dejando ver su cabello castaño claro que parecía tener tonalidades doradas.

- Si no dejas que me acerqué no podré ayudarlo-sus ojos se veían de un tono miel más intenso como si fuera capaz de eliminar el tono verde de este cuando quería intimidar.

Mire a Mike y suspiré, esto lo hago por ti, prometo no dejar que te lastimen.

- ¿Qué es lo que vas a hacer?- pregunté.

El desconocido se quitó el tapaboca, su mandíbula y mejillas eran muy marcadas y su nariz muy respingada, tiene cara de que te manda 6 años a terapia y no lo superas nunca.

- ¿Tú qué crees?- dejo salir sus feromonas, las cuales era de un oc
lor dorado, estás rodearon a Mike- Primero quitar esta basura- quitó la ropa que olía a Noah y la tiró lejos.

Parecía molesto ante el hecho de que Mike tuviera esa ropa cerca.

- Ven aquí- le pido Melek a Mike y este abrió poco los ojos y se acercó con obediencia dejándome con la boca abierta.

Tuvimos que traer a Mike arrastrado hasta aquí y este tipo hizo que mi amigo se moviera sin más.

- ¿Por qué siempre que nos encontramos tienes que apestar a ese imbécil?- pregunto mientras sentaba a Mike en su regazo.

El Omega metió su nariz en el cuello del Alfa con desespero mientras yo solo me sentía incómoda, siento que esto está subiendo de tono, trague saliva cuando vi que Mike gemía en el oído del desconocido.