Más problemas

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-Cómo que te castigaron, mija?- Preguntó de mala gana Julieta junto con Agustín en su oficina.

La mujer leía en el cuaderno de Mirabel que su profesora quería hablar con los padres de la chica por su comportamiento, ellos sabían que Mirabel no era capaz de responder mal a una profesora, ella era la alumna estrella, la que siempre ayuda a todos y nunca trae problemas, eso era más cosas de Camilo.

-Está bien, amor. Dinos qué pasó.- Habló Agustín tomando la mano de su hija que estaba sentada en su silla, la chica cabizbaja respondió apenada.

-Me dormí en clases.. pero no es la primera vez..-

-Cómo?-

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Mirabel seguía castigada en su cuarto, sentía que las cosas para ella no iban muy bien, estando con su cabeza recostada en su escritorio escuchaba como su hermana mayor guardaba sus cosas para clases de básquet.

-Qué pena contigo, Mirabel. Espero que se puedan solucionar las cosas, hermanita.-
Dijo Luisa apenada por ver en ese estado tan deplorable a la menor, ella lo que nunca quiso es que su hermanita tuviera esos problemas con sus padres o en la escuela.

Se acercó a ella para acariciar su cabello; -Oye, tal vez salga tarde pero si quieres podemos hablar después de cenar, qué te parece?-

-..de acuerdo..- Se escuchó en voz baja sin sacar la cabeza de la mesa, Luisa le sonrió antes de salir rápido.

Mirabel al darse cuenta de que estaba sola podía al fin estirar sus brazos al cielo como siempre hacía, estaba cansada de ser el peor centro de atención. Con el pasar de los días los demás ya se habían olvidado de su mala conducta sobre los bebés, hasta Bruno le agradeció por su regalo dejándose abrazar y besar por él, pero aún se sentía mal.

Trajo otro problema a sus padres con esa nota, varias veces le habían perdonado por dormirse en clases pero esta vez no se dejó pasar y no podía culpar a nadie, solo así misma.
Escuchó un golpeteo único en su puerta, su tío con su extraño Toc esperó a que su sobrina le dejara entrar, a pesar de que la puerta estaba abierta, era como un vampiro.

-Amor.. puedo pasar?-

Mirabel le hizo seña con la mano para que pasara tranquilo al cuarto de la joven, éste jugando con sus dedos se acercó.

-Amorcito.. qué pasó contigo? Tu madre nos dijo que estabas en problemas.-

-..sí..- Su voz se notaba desanimada, ocultó su rostro recostando su cabeza en la mesita otra vez.

-Querida.. por qué te dormiste en clases? Qué yo sepa usted tiene muy buen horario, de hecho se despierta antes que todos nosotros, antes que suene la alarma.-

Dijo Bruno para hacerla reír un poco, pero nada, aclaró su garganta sin sonar mal, tomó su mano para que lo mirara pero no hubo resultado, igual no se separó de ella.

-Escucha mijita, si alguien le hizo algo en el colegio, me lo tiene que decir. No soportaré que molesten a alguno de mis sobrinos.-

-..no fue eso.. soy yo la tonta..-

-Qué?-

Mirabel levantó despació su cabeza para ver a su tío, se notaba preocupado, ocultó otra vez su rostro.

-Qué le pasó, mijita?-

-..no pude dormir nada hace días..-

Contestó entristecida, Bruno se acercó a ella para ayudarle a levantarse y guiarla a la cama para que hablaran más cómodos, era más para abrazarla. Ella no luchó con eso, lo dejó pasar.

"Dulce Brunito"/Encanto Au/ MpregDonde viven las historias. Descúbrelo ahora