Durante el resto de la tarde y las primeras horas de la noche, se la pasaron investigando en internet sobre lo que estaba corriendo. Pero, cuanto más profundas eran las respuestas, más confundidos y agobiados quedaban.
—Aquí encontré algo —dice Naruto finalmente, con los ojos abiertos sobre la pantalla de la portátil.
—¿Qué? —Hinata se inclinó rápidamente para mirar—. ¿Que dice?
—La transmigración... —se quedó en silencio un momento, con ojos escrutadores.
—¿Transmigración? —repitió.
—Dice qué... —suspiro profundamente—, la transmigraciones son algo así como un viaje que realiza el espíritu a través de diversas formas de vida, mientras dure tu vida y luego puedes retirarte de un cuerpo sin sufrir cambio alguno.
—¿Y por qué ocurre? —Hinata respiro hondo, sintiendo que se le escapaba el control—. ¿Por qué sucede esto?
Naruto asintió.
—La transmigración sólo es capaz de ocurrir cuando tiene lugar necesario con un vínculo compuesto con el otro. Debe existir una conexión con el anima —sus ojos saltaban ansios entre párrafos y párrafos—. Se refiere a que solo es posible por alguna especie de compatibilidad con el cuerpo del otro. De esa forma es que ocurre.Al terminar la investigación, la oscuridad de la noche había caído. Naruto y ella se dirigieron a su habitación, con Hinata lanzando miradas preocupadas. La luz de la noche se filtraba a través de las ventanas y Hinata trataba de respirar hondo, bebiendo el té de esencias de pino que se había preparado. Siente una especie de calma extraña a pesar de la estupidez de la situación.
Lo mira fijamente.
—¿Qué es lo que tenemos que hacer? —pregunta—. No quiero que cada vez que desee algo con mucha fuerza, suceda esto.
Sigue observando a Naruto, y entendía que era su culpa que estuviera acojonado y un poco impotente.
—¿Y crees que tengo idea de lo que se debe hacer?
—Por supuesto que no... —musitó apenada—, solo supuse que si ya sabíamos por qué se origina, tendríamos también la manera de revertirlo.
—Oh, entonces, ¿harás lo que sea necesario para cambiarlo? —la mirada azul de Naruto era devoradora—. ¿Incluso si no es por tu bien? —hace una pausa y en ese silencio, todo lo que escucha es la respiración laboriosa de Hinata—. Lo siento, amor. Esto me esta volviendo loco. Todavía no concibo la idea de que una persona pueda ser capaz de hacer algo así. ¡Es como una puta fantasía!
—¿Por qué no me dices lo que piensas que puede suceder?
—Porque honestamente no estoy seguro —da otro paso más cerca, mirándola a la altura de sus ojos—. Hay tan pocas probabilidades de que sepamos cómo revertir esto. ¿Acaso transmigrar es como anidar en el cuerpo de alguien o más cómo estar dividido a la mitad?
Hinata no responde.
Ella me dirigir una mirada haciendo un puchero. Tal cual están las cosas, Naruto suspira como si estuviera agotado.—Quizá no hemos entendido bien —dice, sentándose junto a ella en el borde de la cama. Una sonrisa regresa a su boca, como si una idea brillante hubiera aparecido para deleitarlo—. ¿Y si tratamos de buscar a una persona que sepa de esto? Podríamos googlear y encontraríamos algo. Una vez que lo hayamos hecho, mientras no corramos peligro podríamos tomar acción.
Durante un momento, Hinata se queda quieta, como congelada.
—Está bien —le dice—. Pienso que estaremos bien.

ESTÁS LEYENDO
|En tus zapatos|
FanficDicen que cuando pides un deseo: a veces esta el demonio. Para joderte la vida, solamente. Una historia tan divertida y dramática tiene muchos demonios y hay que estar alerta a no caer en sus garras. Por suerte, no hablamos de uno literalmente; Hi...