Black & White

Cap65

Abro los ojos y lo primero que veo es la mano de Alejandro aferrada a la mía. Sonrío como tonta. Me giro con pesadez sobre sus brazos, lo oigo gruñir por lo bajo y con su brazo libre me atrae a su cuerpo. Descansa la cabeza en mi pecho y mete su mano debajo de mi camisa.

- Cinco minutos más cariño. - pide con voz rasposa.

- No sabes cuanto me alegra oírte decir eso. - acaricio su cabellera negra desordenada.

Enrosco mi pierna en su cintura creando le así un amarre. Si intenta levantarse no se me escapa. Hoy se queda conmigo si, porque si. Vuelvo a dormir plácidamente con mi pelinegro.

Despierto por un besito.

Uno muy húmedo, limpio mi cara con una mueca de asco. Abro los ojos encontrándome con la bola de pelos negra. Le sonrío sin ganas, camina hasta mis pies y tira de la sabana que cubre mi cuerpecito.

- Darkness, bonita no. - me quejo - Ve a molestar a papá.

Y la muy demonio, como si entendiera lo que digo. Salta de mis piernas a las de Alejandro, camina por su cuerpo olfateando todo lo que se le cruza por el medio. Llega a su pecho y se sienta en el, al ver que no hace nada. Olfatea el cuello del pelinegro y estornuda. - creo que no le gusto su olor - Pasa su nariz por toda la cara de Alejandro y me sorprende que no se haya despertado, Dark llega hasta su oreja y antes que pueda agarrarla, suelta un ladrido que lo hace despertar y caer al suelo a bruces. Suelto a reír como desquiciada, la perrita salta y se acomoda en la almohada de Alejandro mientras el la mira mal.

- Muy bien rata peluda. - mira a la cachorra colocando sus brazos en jarra luego de levantarse - En primer lugar, esa, es mi almohada. En segundo lugar, eres una pulga manipuladora y en tercer lugar, tu dueña es mía, no tuya. -  señala a Dark con el dedo índice.

Ella solo lo mira y mueve su colita esponjosa.

- ¿Te vas a quitar o qué? - se cruza de brazos esperando a que Dark se levante. Obediente, se estira, baja de la cama de un salto y rasga la puerta, Alejandro le abre y seguidamente le cierra tras las patas. Me rio por su actitud con Dark. Regresa a la cama y se tira a mi lado, me mira, lo miro.

- Iré a darme un baño si. - digo para levantarme de la cama pero el me lo impide - Alejandro...

- ¿Y mi besito de buenos días? - me hace ojitos.

- ¿Al menos podrías dejar que me cepille los dientes para dártelo?

A regañadientes me suelta, entro en el baño con una sonrisa. Me alegra la normalidad, me alegra estar en casa.

[...]

- Abre.

- No.

- Mackenci Winslet Painer. Abre la boca y chupa.

- ¡No! - vuelvo a chillar cubriendo me con la sabana - Eso es asqueroso.

Alejandro suspira y rueda los ojos. Está teniendo paciencia conmigo pero se la estoy agotando.

- Preciosa abre la boca y chupa. Te hará bien.

- ¡No!

Llevamos media hora en esto. A los días de volver a casa Connor regreso para ver mi proceso, y le dijo al pesadito este, que antes de comer debo tomar unas asquerosas pastillas masticables.

- Bien tu ganas. - se rinde, me quita la sabana y toma mi pasta para dármela - Abre la boquita.

Aplaudo como niña chiquita. Le hago caso y abro mi boca, acerca el cubierto con la pasta, pero antes de introducirlo en mi boca toma la pastilla y hace que la mastique. Hago una mueca de asco y tengo con intenciones de escupir la, pero el me para.