Mientras tanto, Yngve había podido entrar en el reino de los selkies, guiado por su papá, pues aunque Cearbhall no podía viajar al reino, hablaban a través de bolas de cristal.
El joven hechicero no nadó por la cueva en la muralla de piedra, sino que llegó por el camino oculto en el bosque, y para que me entiendan mejor, explicaré dónde estaba la casa de esta familia y cuál era la otra entrada secreta al reino"
El narrador encendió entonces varios fósforos, y junto con la lámpara, los movió para trazar en el aire figuras más grandes, formando un mapa, diciendo: "Como ya mencioné, nuestro reino se encuentra entre los territorios de Kallioinenmeri y Kylmä maa, delimitados por el río y su desembocadura, ocultos tras la muralla de piedra, y como recordarán, del otro lado se encontraba el bosque, que Aren había visto parcialmente al salir del castillo por la puerta que da a la pequeña playa. Sin embargo, en su prisa por escapar del torneo, ya no pudo explorar todo el reino y por lo tanto, no encontró el camino oculto que atraviesa el bosque y conecta nuestro territorio con la frontera entre Kallioinenmeri y Kylmä maa.
Ahora, si realmente prestaron atención, entonces recuerdan que cuando el rey Einar fue a buscar a Aren por primera vez, había mencionado que el cambio en la marea haría más difícil el acceso al reino, pero nuestro protagonista no sabía cuál era la razón de esto, ya que la entrada que él conocía era la de la cueva submarina, y ya que siempre estaba inundada, no veía cómo le afectaría la marea. Y la respuesta es que Einar no estaba hablando de esa entrada al reino, sino al camino que Cearbhall mencionó a sus hijos antes de abandonar a Aren en el bosque.
La casa de la familia del villano estaba en el bosque, pero Aren jamás la había encontrado porque nunca había viajado hasta el otro lado del río, con la excepción de la vez que intentó escalar la muralla, debido a que esa zona del bosque, al tener un tipo de tierra distinto al lado que conocía, permitía el crecimiento de especies vegetales diferentes y por lo general, más espinosas, dificultando el acceso a los humanos. Además, y la razón por la que era afectado el acceso por la marea, era que al estar tan cerca de la desembocadura, al subir el nivel del mar, el río, cuya agua dulce es menos densa que la salada del océano, también subía su altura, causando que el estrecho camino quedara lodoso y difícil de transitar. Agreguemos las plantas con espinas y tendremos una vía tan peligrosa que ni un fantasma querrá utilizarla.
Pero mientras el camino estaba en buenas condiciones, llevaría a sus usuarios desde el bosque hasta un pequeño paso, un mini cañón que terminaba unido a la cadena de cuevas en donde vivimos, cerca de la plaza mayor y por ende, del castillo.
Cearbhall explicó todo esto a Yngve, por lo que el joven hechicero pudo llegar sin contratiempo al reino.
Al usar la apariencia de Aren, Yngve no llamó la atención de los guardias ni de la gente. Además, y a diferencia del verdadero príncipe, el brujo podía controlar su transformación al aspecto de humano y al de foca, por lo que era difícil que alguien se percatara del cambio. O por lo menos, en el aspecto físico.
Cuando Yngve entró al castillo, se encontró con Gunnar y Ossian, quienes se sorprendieron al verlo y preguntaron: –¡Aren! ¿Por qué volviste tan pronto? ¿Pudiste encontrar a Cearbhall?
El muchacho dió rápidamente su respuesta: –No pude encontrarlo. Busqué por mucho tiempo en las cercanías del río, pero no lo pude localizar.
–Vaya, qué mal. Aunque, con lo decidido que estabas, creí que no volverías hasta encontrarlo – comentó Gunnar.
Yngve respiró profundo y afirmó: –Lo volveré a intentar después del torneo.
Ossian asintió: –Me parece bien. Y ya que lo mencionas, debemos salir a cazar de nuevo, espero que no estés muy cansado y puedas acompañarnos.
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No hay reinos en el mar
FantasySegunda historia de "La visión del hechicero". Después de volver a Heland, el príncipe Erik descubre que su reino no es el único que debe volver a vivir en paz con los seres mágicos. Corre el año 825 d.C.; Aren es el joven príncipe de Kallioinenmeri...