La venganza de los Riddle

19- Yo nunca nunca

POV MORGAN

A pesar de que en el sillón, se encontraban muchas de las personas con las que no quería convivir en este momento como Pansy, Davina, Matheo y Hermione, deje de lado todo lo que me estaba atormentando de cada uno de ellos y me concentre en fingir que no pasaba nada.

Me fui a sentar a lado de Neville, cuando ya todos estaban en el sillón preparados para iniciar el juego, así que le entregué su vaso y me agradeció con una sonrisa.

— Yo nunca nunca me he acostado con mi mejor amigo o amiga —habló Adrian e inmediatamente todos sin excepción, bebimos.

La mirada de Matheo se poso en mi y mire hacia otro lado, intentando no hacer ninguna mueca.

— Yo nunca nunca he besado a alguien sin conocerlo —habló Davina divertida y fui la única que tomo otro trago.

A este paso voy a terminar peor de lo que ya estaba, aunque de menos no seré la única.

— ¿No vas a tomar? —le pregunto Draco a Matheo y este lo miro confuso.

— Nunca he besado a alguien que no conozco —aseguró y chasque la lengua.

— Tú y yo no nos conocíamos cuando sucedió —le informe y Davina junto con Astoria chillaron emocionadas.

— ¡POR MERLÍN! —exclamó Ron sorprendido.

— ¿En qué momento ustedes dos se besaron? —gruñó Tom.

Flashback

Estaba sentada en la esquina de la celda, pensando en como rayos iba a salir de ahí, cuando escuche que la puerta del pasillo se abría. Sonreí de lado cuando me di cuenta que Matheo apareció por el pasillo con una charola llena de comida. Rápidamente me recargue en la pared, con los brazos cruzados y sonreí cuando él  me miro confuso.

Tenía una idea.

— ¿Qué te pasa? —me preguntó confundido.

— ¡Ey! chico sexy —su cara cambio por completo, así que me empecé a acercar a él de una manera provocativa— libérame y juega conmigo —le pedí haciendo un puchero.

Matheo tragó saliva pero se empezó acercar a mi. No estaba completamente segura de lo que estaba pasando, pero parecía que estaba hipnotizado o algo por el estilo, lo cual funcionaba para mi en este momento porque con algo de suerte conseguiría hacer que me sacara de esté horrible lugar.

Una vez que estuvo enfrente de mi colocó sus manos en los barrotes de la celda.

— ¿No lo puedes ver? —le pregunte poniendo mi mano derecha en su cabello mientras que con mi mano izquierda tomaba su playera y lo pegaba hacia mi— tú perteneces a mi lado —susurre muy cerca de su cara.

Esto funcionaría mil veces mejor si la celda no estuviera en medio de ambos.

— De acuerdo —cedió sobre mis labios y me deje llevar.

Con un poco de dificultad por los barrotes que estaban entre ambos, lo besé.

Admito que ya había besado a muchos chicos antes, pero ningún de todos ellos se comparaba con los besos de Matheo, porque en cuanto sus labios se unieron con los míos sentí una corriente eléctrica recorrer todo mi cuerpo. Fue  algo tan mágico que ni siquiera puedo describirlo.

Por suerte para el plan cuando me separé de él por falta de aire, desperté de mi sueño y me concentre de nuevo.

Matheo aprovecho que nos sepáranos y abrió la celda.