Capítulo 1.

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Gp de Miami

El señor Torger Christian Wolf me mira con recelo mientras mantiene a un Jack muy dormido contra su pecho, como si yo fuera algún secuestrador de niños que quiere arrebatarle.

—Si no te vas ahora, voy a llamar a la policía.—Advierte, rodeandome con cuidado para entrar al hotel.

Suelto un suspiro y niego con la cabeza, divertida. No me molesta que actúe así, al contrario: lo entiendo, pues su esposa nunca nos presentó. Y es entendible que cualquier padre reaccione así cuando una extraña-como yo lo soy para él-intenta llevarse a su hijo.

—Lamento el malentendido.—Empiezo a explicar con amabilidad, haciendo que se detenga justo antes de atravesar la entrada. —Me llamo Paula, y soy la niñera de Jack.—Él al escuchar las últimas palabras, da media vuelta y me mira con el ceño fruncido.—Su esposa me contrató para viajar con ustedes y su equipo,—Explico al ver que me mira como si fuera un bicho raro, y eso la verdad me empieza a incomodar.—dijo que necesitaba ayuda extra para cuidar a Jack, ya que va mucha gente y no quiere que algo suceda. La verdad yo tampoco, entonces acepté el trabajo, y aquí estoy.—Extiendo las manos al frente de forma teatral y lo miro expectante, pero él no dice nada, solo me mira fijamente.—¡Dios! No está pensando en despedirme, ¿verdad? Porque yo en verdad necesito el trabajo, y no es como que me pueda quedar aquí sola sin un lugar donde dormir...

—Sí, ya, ya.—Le resta importancia con una mano y noto como relaja sus hombros.—Ahora lo recuerdo. Ella dijo esto, pero se me olvidó por todo el trabajo.

—Sí, ella dijo que nos veríamos en el circuito. Es por eso que...

—Jack y tú iban de camino ahí justo ahora.—Completa. Yo asiento.

—Sí, disculpe, pero usted no avisó que vendría y...

—No, discúlpame tú a mí. No debí tratarte así.—Contrae el rostro y toma el puente de su nariz con su pulgar e índice—Es solo que el trabajo de la escudería me estresa demasiado.

—Sí, no se preocupe. Yo entiendo.

Debe ser muy difícil ser el director, es mucha presión que el equipo dependa de tí.

Él me da una sonrisa de boca cerrada, antes de ver a Jack que sigue dormido y luego vuelve a mirarme.

—¿Podrías...

—Claro.—Me acerco a él y tomo a Jack entre mis brazos con sumo cuidado de no despertarlo.—¿Vendrá con nosotros al circuito?—Pregunto mientras meso a Jack que empieza a removerse. Tiene apenas tres años y no puedo evitar tratarlo como un bebé.

—Sí.—Contesta distraídamente mientras teclea algo en su teléfono.—Nos iremos en unos minutos, de hecho ya nos está esperando mi chófer. Solo voy a entrar a traer unas cosas a la habitación y regreso. Ustedes suban al auto.—Mira detrás de mí y hace una señal a alguien para que se acerque.—Mi chófer te ayudará con la silla de Jack.

Es lo último que dice antes de entrar trotando al hotel y dejarme ahí parada con la palabra en la boca.

Después de que el chófer me ayude con la silla de Jack y el bolso con las cosas que un niño de su edad necesita-que es mucho para una persona tan pequeñita-subimos a la Mercedes negra y aprovecho para llamar a la mamá de Jack e informarle la situación, pero en cuanto desbloqueo mi celular encuentro un mensaje de ella avisando que nos vayamos con el señor Torger sin problema ya que ella probablemente llegue tarde.

En cuanto él regresa, sube al auto y tomamos camino al circuito de Miami.

—¡Ya voy en camino! ¡Maldición!—El grito del Señor Wolf me hace sobresaltar. Parece molesto, lo que se me hace un poco raro porque hace solo unos minutos se había disculpado conmigo.—¡¿Cómo que George aún no llega?! ¿Ya le llamaste al celular?

Temporada Inesperada. (Carlos Sainz Jr Fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora