Arik.
Llegó la noche de la fiesta. Sería en la casa de Oliver como la vez anterior.
Todos estábamos en la sala de mi casa terminando de disfrazarnos.
Decidimos ir todos de una sola temática.
Clyre y yo estábamos maquillando a los chicos para que parecieran verdaderos zombis.
Usamos ropa rasgada y con manchas de pintura para simular la sangre. El maquillaje era para las heridas falsas y el color pálido que deberíamos tener.
—¿Creen que si nos veamos bien? — nos preguntó Nate — Nunca he ido a una fiesta con adolecentes normales.
—¿Somos normales? — Clyre frunció el ceño.
—Buen punto — respondió Nate — Pero, me refería que todos dicen que es divertido.
—No te pierdes de mucho, sólo a un montón de adolecentes borrachos haciendo estupideces — reí leve.
— También seremos ellos en unas horas.— comentó Aron riendo.
Terminamos de maquillarnos y tomamos nuestras calabazas y las dejamos en el porche como decoración de Halloween de mi casa.
Luego caminamos hasta la fiesta.
Nate estaba nervioso, podía notarse.
—Hey, tranquilo, harás más amigos ya lo verás — intenté tranquilizarlo.
—Pero, ¿si me hablan y no sé que decir?, ¿O me trabo al hablar?, ¿Qué tal si hago el ridículo con solo mi presencia? — me preguntó.
—Aunque no lo parezca cada quien está en lo suyo allá, yo tampoco voy a socializar, sólo acompañar a los que si socializan — señalé a Aron y a Clyre.
—Está bien, intentaré socializar más — asintió con una leve sonrisa.
Cuando llegamos a la casa de Oliver el guardia de afuera nos dejó pasar.
Adentro todos estaban con sus disfraces de monstruos y otras cosas.
La casa estaba casi llena.—Bueno legión, Zombi uno se va a socializar — nos dijo Aron — Los veo luego.
Se fue a hablar con una chica.
—Zombi dos triste, quería socializar estar con Zombi uno — hace una mueca.
—Pues tal vez Zombi dos debería decirle a Zombi uno lo que siente — la miré.
—Zombi tres cálmate — ríe ella.
Nate nos miró con confusión.
—¿Debemos hablar así?
—Sólo es una broma zombi cuatro — reí leve.
—Ah… zombi cuatro no entiende bromas de otros zombis — hace una leve mueca.Clyre y yo reímos leve.
—Tranquilo, no nos prestes atención, solo estamos entrando en personaje, vamos por algo de beber — sonreí.
Nos dirigimos a la mesa de bebidas. Habían varias botellas de alcohol de varios colores y sabores.
Nate empezó con servirse un vaso de la botella con Vodka.
—Hola, chico zombi sirves a mi también, por favor? — una chica pelinegra con disfraz de bruja le preguntó a Nate.
Nate volteó a hacia nosotras y luego a la chica.
—¿M-me hablas a mí? — preguntó nervioso.
—Sí, no veo otro chico zombi aquí — ríe leve la chica.
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Sólo un juego#1©
Teen FictionArik y Alexander, son adolescentes cuya única cosa en común son sus experiencias poco convencionales en el amor. Un día deciden dejar sus diferencias de lado, y empezar una relación falsa, donde ambos estarán beneficiados, pero también sus propios s...