Sólo un juego#1©

Capítulo 39

Enero.

Después de navidad tuvimos unas cortas vacaciones, pero finalizaran pronto.

La última semana, aunque aún me sentía extraña teniendo algo real con Xander, me alegraba de cierto modo porque me sentía bien estando con él, pero aún tenía mis dudas.

Este cambio tan repentino…

Tal vez sólo sea mi imaginación.

No debería pensar en eso.

Todos estábamos dirigiéndonos a la pista de patinaje del estadio donde también juegan Hockey.

A veces lo abren al público ya que los demás están llenos.

La idea fue de Clyre ya que quería estar más cerca de Aron y nosotros le ayudaríamos con eso.

Hoy se suponía que solo seríamos nosotros, pero al llegar tuvimos la sorpresa de que Oliver, Kent, Becky y Leah estaban ahí también.

¿Esta chica es psíquica o qué?

¿Por qué siempre tiene que estar en todos lados?

«Cálmate Arik»

—Chicos, que coincidencia — nos dijo Kent.

—Sí, ¿Llevan mucho tiempo aquí? — les preguntó Xander.

—No, acabamos de llegar, apenas se ha vaciado un poco — respondió Oliver.

—Bien, nosotros queríamos venir antes, pero siempre estaba lleno — me explicó Xander.

—Yo tengo que practicar para la competencia de este sábado, así que aprovecharemos que casi no hay nadie — comentó Leah.

Claro, había olvidado que ella es patinadora casi profesional.

Mi padre quería que también lo fuera, ya que Aron juega hockey, y yo también podría haber hecho algo relacionado con el patinaje, pero nunca me llamó la atención.

—Genial, seguro lo harás bien — Xander le sonrió leve.

—Sí, nosotros deberíamos ir a ponernos los patines, ¿No? — lo miré — También deberíamos aprovechar que no hay casi nadie — le sonreí.

—Sí, vamos — me dijo — Nos vemos en un rato — les dijo.

Vamos a las gradas que habían ahí para poder ponernos los patines.

Estaba algo nerviosa porque hace años no los uso.

Espero no hacer el ridículo.

—Chicos, ustedes vayan, yo los veré desde aquí — Clyre se sentó en una de las gradas.

—¿Por qué?, ¿Qué ocurre? — le pregunté.

—Es que no lo había dicho antes, pero, no sé patinar — nos miró con una leve mueca de tristeza.

Clyre está mintiendo.

Ella sabe patinar, sólo que hace eso para acercarse más a mi hermano.

—Oh, pero Aron puede enseñarte — los miré.

Nate me apoyó asintiendo.

—Sí, no hay problema — respondió él — Te esperaré para ayudarte a entrar a la pista.

—¿De verdad?, Gracias — ella sonrió con inocencia.

Reí leve.

Que astuta.
—Me adelantaré — nos dijo Nate.

Asentimos.

Él entró primero a la pista sin ninguna dificultad.

Tomé la mano de Xander.

—¿Vamos? — me sonrió.

Asentí.

—También tienes que ayudarme, hace mucho que no uso estos patines — reí leve.

—Ya verás que podrás — dijo entrelazando nuestras manos.

Entramos a la pista de patinaje y me sostuve de él unos segundos antes de perder el equilibrio.
—Okey, solo necesito un minuto para prepararme mentalmente — reí.

—Tranquila, sólo encuentra el equilibrio, cuando te suelte impúlsate hacia adelante — me explicó.

Asentí.

Recuerdo que no era tan difícil.

—Bien, lo intentaré — asentí.

Él sonrió y me soltó.

Intentando mantener el equilibrio, comienzo a impulsarme para avanzar por la pista.

Al inicio tambaleo un poco, pero luego pude mantener la postura y avanzar sin caerme.

Xander se mantiene a mi lado.

—¿Lo ves?, Lo estás haciendo bien — me sonrió — Vamos a dar una vuelta.

Asentí.

Tomé su mano de nuevo y damos una vuelta completa.

Los demás también estaban patinando en círculos.

Excepto Leah qué estaba haciendo algunos movimientos extravagantes para su competencia.

Oliver estaba patinando mientras la veía.

En un momento ella se desliza hasta donde nosotros estamos haciendo que nos detengamos para no chocar con ella.

Lastima que yo no me detuve a tiempo y choqué con una de las paredes.

—Lo siento — me sonrió con falsedad acercándose a mi — ¿No te lastimaste verdad?

—No, solo…— intenté decir.

—Lastima — murmuró y se alejó.

Entrecerré los ojos mirándola.

Fingiré que no lo hizo a propósito.

—¿Estás bien? — me preguntaron Xander y Nate al mismo tiempo cuando se acercaron a mi.

—Sí, tranquilos — reí leve — ¿Cómo aprendiste a patinar Nate?

—Solo, en realidad es la segunda vez que lo hago — se encogió de hombros.

—¿De verdad?, Es genial — sonreí.

—Bueno, ¿Seguimos? — Xander tomó mi mano de nuevo para continuar patinando.

Mientras patinamos veo que vamos más rápido cada vez y no me he caído.

—Había olvidado lo divertido que era — sonreí.

—Casi siempre lo hago así que lo veo normal, pero contigo es más divertido — me devuelve la sonrisa, luego miró a Clyre y Aron.— Se ve que ellos también se están divirtiendo.

Volteé para verlos.

Mientras Aron le enseñaba a Clyre ambos cayeron y empezaron a reír, luego se levantaron para volverlo a intentar.

Se veían bien juntos, espero Aron pueda darse cuenta de eso.

—¡Qué genial!— escuchamos decir a los demás.

Volteamos para ver s Leah.

Ella estaba dando giros sobre un solo patín. Dio un pequeño salto y luego llegó al suelo sin caer.

Me quedé sorprendida también. Si que es buena para el patinaje.

—Gracias, ya lo sé — se acomodó su cabello.

Qué arrogante.

Volteé los ojos, y alejé a Xander para que continuemos patinando.

Estaba comenzando a divertirme de verdad, hicimos un par de carreras.

Las cuales gané solo una vez, pero fue divertido intentar ganarles a todos.

Después de unos minutos, solo quedábamos Nate, Leah, y yo.

Los demás habían ido al baño.

Estaba patinando del otro lado de la pista sola intentando recordar algo de las clases que tomé hace años, pero no podía hacerlas tan bien.

Leah estaba pasando junto a mi constantemente.

—Deja de intentarlo Arik, puedes lastimarte — me dijo con una risa burlona.

Claro, estoy segura que lo que quería decir era “Puedo hacer que te lastimes”.

—¿Quieres que te enseñe como se hace? — me preguntó deteniéndose frente a mi.

—No gracias, puedo sola — le dije con seriedad.

Intenté girar sobre mi propio patín como lo había hecho ella, pero no pude.

Ella patinaba a mí alrededor.

—No tienes confianza en ti misma, por eso nunca pudiste — me recordó.— Fue lo mejor haber dejado las clases de patinaje.

—No seguí las clases porque no era lo que me gustaba— continué patinando para alejarme de ella.

Él primero en volver fue Xander.

Aproveché el momento para irme a patinar con él.

—¿Son amigas de nuevo? — me preguntó.

—No — dije con seriedad.

—Bueno, si estaban hablando es un avance, ¿No? — me miró.

Negué con la cabeza.

Ni siquiera estaba hablando conmigo, estaba molestándome.

Mientras estábamos patinando tomados de las manos y estábamos yendo rápido, repentinamente Xander soltó mi mano.

Lo miré y él se estaba dirigiendo rápido a Leah qué estaba a punto de caerse.

Sin darme cuenta caigo sentada la suelo y lo que me detiene es la pared.

Eso me dolió.

Aunque no sé que me enojó más, el golpe o que Xander me haya soltado la mano para ayudar a Leah.

Froté mi espalda donde me dolía.

—¿Estás bien Arik? — me preguntó Nate entendiendo su mano hacia mi.

—Sí, gracias — tomé su mano.

Después de levantarme con su ayuda.

—¿No te hiciste daño? — escuché preguntar a Xander.

—No, estoy…— intenté responder, pero vi que le preguntó a Leah.

—No, estoy bien gracias a ti — le sonrió ella y lo abrazó — Si me pasaba algo, no podré participar en la competencia, gracias…

Mientras lo abrazaba me miró con una sonrisa burlona.

Los miré con los ojos entrecerrados.

Lo hizo apropósito.

Luego se separa de él para mirarlo.

Los demás regresan.

Que buen momento para llegar (pensé sarcástica).

—Mi vida, ¿Estás bien?— le preguntó Oliver a Leah.

—Sólo me torcí un poco el pie, pero nada grave — le respondió ella — Gracias de nuevo Alex.

—No es nada, ten cuidado cuando hagas el giro en el aire de nuevo — le aconsejó Xander.

Claro ahora le da consejos.

—A-arik, me estás apretando muy fuerte la mano — me susurró Nate.

Había olvidado que estaba ahí.

—Lo siento, lo siento — lo solté.

—No pasa nada, No te lastimaste, ¿verdad?

Negué con la cabeza.

—Bien, ¿Seguimos? — me preguntó Xander como si nada.

¿Ni siquiera notó cuando caí?

Volteé los ojos.

—Ya quiero volver a casa — murmuré con seriedad —Si quieres quédate.

Comencé a patinar hacia alguna salida para ir s las gradas junto a Nate.

—Arik, espera…— Xander empezó a seguirnos.

—¿Ya se van? — me preguntó Clyre al verme salir.

—Yo sí — respondí seria.