Llegas tú #3 Saga Amor Destinado.

Capítulo 61: Tía So.

Narra Alex:

Mi cabeza explotará en cualquier momento. Es todo tan confuso, extraño, conocido, familiar y distinto a la vez.

Mamá está sentada a mi lado, en una silla de madera clara con el respaldo y el asiento forrados en piel azul celeste. Entre sus manos sujeta una tableta para mostrame algunas fotografías.

- Aquí están tus hermanos y tú hermana. De ellos si te acuerdas.

- Si, mamá. Si ya los he visto. Me acuerdo perfectamente, solo están más mayores.

- A ellas las reconoces?- Desliza el dedo para mostrar la imagen de una chica pelirroja de tez pálida y otra rubia de mirada clara.

Imagino que ellas serán las parejas de mis hermanos, pese a que no me resultan nada familiares.

- Supongo que serán las mujeres de Enzo y Max?

- Ella - señala la rubia- es Camila, la esposa de Enzo. La pelirroja es Emma.

- Hace años Max estuvo un tiempo que llegaba todos los días borracho a casa y no paraba de decir ese nombre.

- Esa misma.- Vaya con mi hermanito.- Enzo y Camila tienen cuatros hijos.

- ¿Soy tío?- Mamá asiente. No lo puedo creer. Soy tío.

- Soy una abuela muy orgullosa y joven.- Presume.

Trato de recordar a mis cuñadas, a mis sobrinos. No sé si reconozco sus rostros por las fotos o me resultan familiares. Todo es muy confuso, nuevo y conocido a la vez.

Es tan extraño despertar un día en la cama de un hospital, creer que tienes una edad que no tienes y darte cuenta que has olvidado varios años de tu vida. Olvidarte de momentos vividos, de recuerdos, de risas, de personas a las que he amado. A saber a quién habré olvidado. Siempre he sido alguien muy discreto con mi vida privada, no soy muy dado a tener relaciones serias. Quizás ahora estaba saliendo con alguien, nada serio, seguramente.

Tengo una larga recuperación por delante. Mi musculatura está débil, al haber estado postrado en la cama varias semanas. El personal de enfermería me ayuda a realizar ejercicios de fisioterapia para fortalecer y tener más movimiento.

Estoy ansioso por salir de la cama para empezar a andar. La doctora Valencia, dice que aún es pronto que todo vendrá. Al parecer al haber estado varias semanas en la cama sin moverme, ha debilitado mi cuerpo.

Reviso de nuevo las imágenes que mamá me dió tratando de recordar si soy capaz de reconocer a alguien.

Miro con detenimiento cada detalle de la imagen, cada centímetro tratando de ver si algún elemento me resulta familiar.

En una de las imágenes, en el fondo diviso unos cabellos castaño claros, por la luz que le da parecen hasta un poco rubios y partes del cabello en rosa. No se ve muy bien, lleva algo de ropa muy colorida. Me recuerda a esa chica que vino el primer día. ¿Cómo se llamaba? Era tan hermosa, parecía un ángel. No se que ha sido de ella, desde entonces no he vuelto a verla.

La enfermera cambia la medicación, cuando por la puerta entra mi hermano Max con su hijo pequeño, lleva consigo una bolsa.

- Hola, hola. Cómo va la reconfiguración del sistema?

- Mal. Los espectadores dicen que no me preocupe, que lo tome con calma. Él debe ser Bruno.- Sin duda es hijo de Max, es muy parecido aunque este tiene el pelo rojizo.

- Bruno Ferretti Salinas, tengo tes anios. Papi drise que te has olvidado me muchas cosas, yo también me olvido de cosas. El oto día me olvidé mi muñeca de Hulk en el parque.