Capitulo 3: Propuesta de trabajo.

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Odio el despertador, lo odio, deberían ser ilegales. Algún día me haré presidenta del gobierno para ilegalizar los despertadores. En fin tengo que irme a la ducha pero antes haré un pis bien largo.

Tras salir de la ducha, secarme y plancharme el pelo entro en mi vestidor, busco una camiseta de rayas negras, un pichi rojo, un calcetín verde y otro amarillo, y mis inseparables botas Dr Marteens. Hacia muchos días que no me las ponía. Disculpad a mamá por teneros tan abandonadas.

Una vez vestida y arreglada, bajo a desayunar. Ya me llega el olor a tortitas y los gritos de los dos ogros que tengo por hermanos pelear.

- Buenos días papá.- Me acerco a mi padre y beso su sien.

- Buenos días cariño.

- Buenos días mamita querida.- beso su mejilla.- Buenos días feos.

- Piérdete- contestan ambos al unísono. Tan amorosos como siempre. 

Cada vez que llevo este pichi mamá tiene que venir a ponerme el otro tirante. Qué le cuesta entender que solo lo quiero atado de un lado.

- Hija Sofía, yo no sé como te dejan ir así al trabajo. Deberías ir mas sofisticada. Ponte la ropa que te compré.- Me compró unos traje chaqueta de abuela, ni loca me pongo esas faldas de señora aburrida lista para ir a la iglesia en cualquier momento.

- Trabajo en una revista de moda.  Faltaría menos que no pudiese vestir como me de la gana.

- Lo tuyo no es moda cariño.

- Lo que tu digas- Bufo- Déjame desayunar.

- Me vas a sacar canas verdes hija.

- A Sofi le salieron rosas- Se burla León.

- Déjame en paz.- le lanzo una mirada.

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Si algo amo de ir a trabajar es alejarme de esa panda de locos a los que llamo familia. Los quiero más que ha nada en este mundo pero una aquí necesita paz.

Llego a la oficina y tras dejar mis cosas en mi mesa, voy directa al Office a prepararme un té. Soy más de café que de té, creo que en Londres me acostumbré a ello. Allí me encuentro con Marta, es mi compañera de enfrente y una de mis mejores amigas.

- Tía, no lo vas a creer. Esta mañana llego a la empresa toda feliz porque hoy estreno esta falda-Inclina su cadera para lucir mas sexy.-Entro en el ascensor, estaba yo sola y cuando las puertas están apunto de cerrarse asoma una mano y entra al ascensor Fernando, el director de marketing, ese tan guapo- Asiento.

- Me acosté con él.

- No te creo. Me tienes que contar que tal.

- Normal. No se. No me acuerdo.

- ¡Joder tía! En fin que me ha visto, me ha sonreído y cuando me he bajado ja dicho que espera volver a verme. Tía, yo creo que le gusto.- A ese le gustan todas.

- Puede ser.- Tomo el vaso de té y me dirijo a mi mesa. Marta viene detrás de mi.

- Me tienes que contar que tal en la boda de tu hermana.

- Bien. No sé emocionante como todas las bodas. Emma estaba preciosa.- Y bueno un capullo con cara de acelga me mancho todo el vestido y no se como terminé la noche dentro de una de las habitaciones con mis tetas aplastadas contra una mesa, mientras ese imbécil me embestía con fuerza y me hacia gemir como nunca lo había hecho.

Llegas tú #3 Saga Amor Destinado.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora