Derramaré Tinta

CAPÍTULO 14

Quería mandarle un mensaje, verdaderamente quería hacerlo pero sabía que no debía.

Quería que me explicara tantas cosas y a la vez no quería ni una sola explicación, tan contradictorio era mi pensar que me abrumaba y frustraba conmigo misma.

Aun así...aun así existía una parte de mí que todavía se preocupaba por él y me parece curioso como el amor, la cercanía de una persona, en momentos como estos, no se olvida que estuvo en tu vida y te sigues preocupando por ellos.

Niego con la cabeza y dejo caer el teléfono en la mesa de mi oficina.

La luz del día entra con fuerza por el ventanal anunciando que este día puede ser diferente al anterior.

Aun cuando el día anterior revolvió y saco cosas que quería demasiado enterradas si digo la verdad, quería que estuvieran los más lejos posible para no tener que enfrentarlas.

Tocan la puerta y levanto la mirada, se abre un poco y veo la cabea de Anne asomarse un poco.

Cuando me mira entra y cierra la puerta.

-Te tengo que contar algo.

Se deja caer en una silla frente a mí y yo me acerco con sumo interés.

Ella me mira y yo levanto las cejas diciéndole que continúe.

-Ella se fue.

Eso me saca de onda totalmente.

-¿De qué hablas?, ¿quién se ha ido?

Ella ve a su alrededor y luego a mí.

-La doctora Perssley.

Vaya, eso sí que no me lo esperaba en lo absoluto.

Parpadeo varias veces y me reclino en mi silla.

-¿Renuncio?

Anne asiente y yo abro los ojos sorprendida.

No puedo evitar pensar el porqué, especular en la posibilidad de que ahora mismo estén juntos, al final son pareja, quizá y tenían otros planes juntos.

Él se fue y ahora ella también.

-¿Crees que están juntos?

Veo a Anne y ella estira una mano sobre la mesa tomando mi mano, mirándome con pesar.

-No voy a mentirte pero la posibilidad es muy alta.

Es verdad, la posibilidad es tan alta que mi corazón se oprime en mi pecho. ME tomo por sorpresa, sí, pero aun así hay tantas cosas que no cuadran y que hacen que esa alta posibilidad se convierta en un número muy bajo.

Frunzo el ceño y niego con la cabeza.

-No lo sé Anne, si lo pensamos bien, ella no sabía que Vosk se había ido, se puso como loca cuando pensó que yo lo sabía.

Anne se queda pensando y luego me mira con pesar.

-Suéltalo Anne, di lo que piensas.

-Se pudieron haber contactado después, que no supiera que se iba no significa nada.

Pero es ahí donde yo creo que está equivocada, significa mucho, ¿verdad?

-¿Cómo no le dices a tu pareja que te vas?

Anne se encoje de hombros, sin saber que decir.

A menos que...ya no lo sean.

-Sabes que olvídalo-Anne se levanta y camina a la puerta.-No pierdas tu tiempo pensando en ellos, en si es o no es, no cambia nada, no vale la pena que te atormentes con él, no después de todo

Trago saliva con fuerza y asiento.

Tiene razón, aun cuando mi mente quiere encontrar razones para cambiar algo, la realidad es que no cambia absolutamente nada.

Porque al final del día, son solo especulaciones mías para calmar a mi demonios, para encontrar una manera de justificar lo que hizo.

-Vamos.

Anne sale y yo me levanto de mi silla, tomo mi teléfono y mi libreta y salgo d mi oficina.

-Lo que si debes de saber es que los internos están vueltos locos con esto, creen que el hospital está en quiebra, corrijo, creen un montón de tonterías, y con justa razón, que dos médicos se vayan, bueno...si levanta muchas sospechas y preguntas.

Entramos al elevador y yo me pongo a pensar en lo que están diciendo los internos.

-¿Tú crees...

Miro a Anne y ella niega con una sonrisa.

-No, le pregunte al director y él dijo que fueron cuestiones personales.

Asiento y ella me abraza.

-Lo siento.

Hay tanta pena en sus palabras que verdaderamente no me gusta, niego con la cabeza.

-Son solo especulaciones Anne.

-Cierto.

Pero ninguna de las dos puede evitar lo obvio.

S/A
¡Fin del maratón!

¿O quieren un bonus?

Veamos que dicen.