BEBÉ REAL | Michael Jackson [Book 1]

Cap: 28 | 𝐋𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐩𝐚𝐬𝐚 𝐝𝐞 𝐦𝐚𝐝𝐫𝐮𝐠𝐚𝐝𝐚

Nota: Por fin este es el nuevo capítulo 28, con la misma trama del que borré por accidente pero con nuevos diálogos y nueva narración. Espero les guste esta nueva versión.

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REY MICHAEL

Lo veo todos los días, lo siento todos los días.

Verla sonreír, comenzar a brillar otra vez y ser ella era una nueva oportunidad que la vida le brindaba, entonces, a través de eso me daba cuenta que en realidad, si existe el renacer de las personas.

Y era algo que no había cabido en mis ojos nunca, hasta que pude apreciarlo. Hallé fascinación en verla, en estudiarla, en probar todos sus matices y facetas, fueran o no fueran sexuales, Briana poseía el don de atraparte, de detenerte a observarla, y deleitarte con su belleza, carisma, autenticidad y ánimo, que aunque a veces incluso no tuviera, intentaba ser transmitir.

La lucha contra su enfermedad no había sido facil las últimas dos semanas, el estrés y la preocupación de tener a mi tío Andrew en el palacio eran sin duda un hecho que a nadie aquí dejaba dormir tranquilo. Afortunadamente, el hombre se va mañana y esperaba que las cosas volvieran a la normalidad por aquí.

Ambos estábamos en el jardín, apartados y algo lejos en una de las mesas para almorzar, Briana observaba su plato de comida con detenimiento, como si pensara cada movimiento que tenía que hacer, o si debería o no comer, pero lo hacía, suspiraba un poco mientras repasaba sus ojos entre el plato y sus pensamientos profundos.

—¿Siempre harás eso?— pregunté notando el amago que ella vivía— ¿Darle vueltas a todo antes de comer?

Me miró haciendo una mueca, quizás insultandome en sus adentros por no ser tan paciente.

—Es que... sigue siendo difícil, sabes— tragó saliva— Lo único que me da fuerzas para poder continuar rehabilitandome es el bebé, nada más.

—Pues por el bebé o por lo que sea, debes comer— tomé la iniciativa y me apresuré con los cubiertos a cortar yo mismo un pedazo de carne de su plato, alcé el tenedor frente a su boca— Vamos, te ayudaré, abre.

Briana enarcó sus cejas con curiosidad por mi acto, relamió sus labios pero por suerte me obedeció, abrió la boca y pude darle el primer bocado de su almuerzo.

—Sabe muy bien— dijo mientras masticaba lentamente, sonreí un poco y dejé los cubiertos nuevamente en su plato.

—Mamá ordenó que tus comidas fueran lo más orgánico, saludable y nutriente posible— confesé tomando el vaso de limonada que me habían traído a mi para darle un sorbo— Está muy comprometida con eso.

—Últimamente lo he notado— inquiere ella, pasándose la carne y volviendo a su posición anterior— ¿Crees que sea de verdad?,

Regresé el vaso a la mesa y por su pregunta me detuve a mirarla.

—Eso espero— alcé mis hombros esperando no equivocarme— Se que ella ha estado mucho tiempo apoyando a Amber, sobre todo cuando terminamos, pero, confío en que su interés por ti y el embarazo es completamente sincero.

Desde hace poco más de las dos semanas que han transcurrido mi madre ha cambiado de actitudes respecto a Briana y nuestro asunto. Incluso se ha tomado el tiempo de acompañarla a sus citas con el psicólogo, la nutrióloga e incluso a la última visita al ginecólogo.

Era hasta nuevo para mi verla querer convivir con Briana pero no iba a detenerla, al contrario, me alegraba que lo hiciera.

—Yo quería decirte algo— ella de inmediato cambia de facciones y respira profundo— Michael, si en serio aún amas a Amber no tienes que estar aquí conmigo, entenderé si tú quieres volver con...