Cap: 26 | 𝐅𝐚𝐯𝐨𝐫, 𝐩𝐚𝐫𝐭𝐞 𝐈𝐈

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BRIANA

La expresión formada en el rostro de Amber me dió paso a elevar mi mentón con seguridad, le había hecho perder su estabilidad del momento.

—Ya te lo dije— vuelve a apuntarme con su dedo, pero esta vez más seria, más firme y más molesta— No te metas con mi papá. Podrás haber engatusado a mi hermano pero te juro que haré lo imposible para que no suceda lo mismo con mi padre.

—No es mi culpa gustarle a todo el que me ve— alcé mis hombros con diversión y algo de orgullo. Claramente exageré.

—Al menos Michael no ha puesto sus ojos en tu horrible persona— gruñó.

Sostuve las inmensas ganas de soltar una carcajada en mi garganta por su comentario nada acertado. Si le dijera los avances en cuanto a mi relación con Michael probablemente se desmayaría, pero eso no debía decírselo yo, si continuaba, preferiría que se enterara por si sola.

Hice una mueca.

—Oh, será mejor que me vaya— pronuncié antes de intentar irme de aquí y pasar por su lado.

—No, tú no te vas— Amber me sostuvo del brazo otra vez, evitando mi andar.

—¿Quién te entiende?— fruncí el ceño soltándome bruscamente de su agarre— No me soportas pero supongo que amas tenerme enfrente.

—Sigue soñando, Lynn— ella bufa— Efectivamente no te soporto, y se que tu tampoco a mi— suspiró— Pero esta vez no puedo evitar hacer esto que es tan humillante.

Me crucé de brazos con curiosidad.

—¿Qué pasa?

—Necesito pedirte un favor.

Relamí mis labios pasmada por su comentario, quizás ya me esperaba esto, pero con honestidad, no creí que tuviera la valentía de hacerlo.

—¿Yo?, ¿por qué tendría que hacerte un favor precisamente a ti, princesita rubia?— me burlé— Desde que llegué al palacio solo me tachas de ladrona sin siquiera tener pruebas de eso, siempre me molestas y créeme que no tengo ningún motivo para poder apiadarme de ti.

—Lo sé— se cruzó de brazos también— Y no te rogaré, no lo mereces para nada, tan solo pondré las cartas sobre la mesa y... lo demás quedará en ti.

—Habla ya, comienzas a fastidiarme— espeté ya ansiosa de irme.

Amber entrecerró sus ojos hacia mi, si pudiera lanzarme balas por sus iris se que lo haría, y por la dureza de su mandíbula acompañada de su rigidez corporal me indicaban que estaba tomando todo de sí misma para hablarme y no tirar veneno en el intento.

Mordí mi mejilla interior esperando algún movimiento suyo, hasta que llegó, con dificultad.

—Ayúdame fingiendo que somos amigas— comenzó— Solo ante mi padre, Michael y yo también estamos fingiendo seguir juntos y comprometidos, pero únicamente hasta que él se regrese a casa— tragó saliva duramente— Odio estarte pidiendo un favor, Briana, y sobre todo un favor como este porque se que ni en un millón de años podríamos ser amigas. Mentí por desesperación, no se me ocurrió otra cosa, ahora mi padre cree que Michael es feliz conmigo, que nos casaremos pronto y que tú eres una princesa amiga mía. No se como mantener todo esto hasta que se vaya pero supongo que no es imposible— exhaló aire un segundo— ¿Qué dices?

Una sonrisita sarcástica brotó de mis labios al oírla, casi pude adivinar cada una de sus palabras y oraciones, se hacía la fuerte pero no lo era.

En un segundo identifiqué que tantas mentiras y el esfuerzo de Amber al montar un escenario perfecto para Andrew significaban que lo único que le importaba era la aprobación de su padre, y tal vez de su familia en Manchester.

BEBÉ REAL | Michael Jackson [Book 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora