Huan Qing Yan se encontraba en un estado extremadamente terrible, durante los primeros días había gritado y vociferado:
-¡Dejadme salir! Déjenme salir!
Quería buscar al Joven Maestro Ya.
Como él no estaba aquí, planeó abandonar la Academia Ola Creciente y dirigirse al Clan Ji Mo...
Sin embargo, nadie se preocupó por ella, ni siquiera cuando gritó hasta quedarse sin voz, sólo pudo permanecer dentro de la solitaria cueva, con el corazón roto, sintiendo como si el mundo entero la hubiera abandonado.
Sólo unos días más tarde, finalmente reconoció que se había convertido en un hecho irreversible.
No volvería a encontrar al joven maestro Ya.
A no ser que fuera él quien la buscara, aunque muriera aquí, nadie se preocuparía por ella.
La desolación y el desánimo la calmaron lentamente.
Ji Mo Ya fue capaz de sobrevivir a una emboscada y a estar rodeado por un Rey Demonio durante varios días, ya que la puñalada de la chica reencarnada no lo mató en el acto, entonces debería estar bien.
Si realmente hubiera muerto, alguien habría venido a matarla hace mucho tiempo...
Ya que nadie vino por ella, significaba que lo más probable es que estuviera bien.
Es bueno siempre y cuando estuviera a salvo.
Esto era bueno.
A partir de este incidente, por fin se había dado cuenta de la enorme brecha en forma de montaña que había entre los dos.
Como un mar profundo, una vez que él decidió no preocuparse por ella, ella era como una cometa con la cuerda rota, la sensación la hacía sentir disoluta.
Era simplemente demasiado débil y demasiado pequeña, comparada con él era una hormiga.
¿Cómo podría una hormiga poseer la capacidad de encontrar una gran águila volando por los nueve cielos?
¡Ella no la encontraría!
A menos que ella también pudiera aprender a volar, a menos que también se convirtiera en un águila.
Ella siempre sería incapaz de encontrarlo.
¡Bien, que así sea!
Si surge una oportunidad y se encuentran en el futuro, entonces ella tratará de explicar lo que pasó.
Si la oportunidad no se presentaba, tampoco la forzaría, el Camino de un Rey era concentrarse en su cultivo.
Aunque decidió eso, su corazón seguía doliendo mucho, sentía dolor por cada respiración que hacía.
Un día, dos días, tres días, cuatro días...
Permaneció en el Acantilado de la Reflexión y contempló el agua del mar sin límites, era tan silencioso que se sentía como si estuviera viviendo en otro mundo.
Un mundo olvidado.
Después de varias docenas de días, en el momento de la entrega de un paquete de alimentos, recibió una nota.
-Pequeña Yan, ¿sigues ahí abajo? No tengas miedo, la energía espiritual del fondo es bastante buena. Si no te liberan pronto, puedes aprovechar la oportunidad para entrenar en soledad. Aquí hay algo de Jade de Tinta, son plantas espirituales raras así que guárdalas rápidamente dentro de tu anillo de almacenamiento. Cuando no haya nadie cerca, rómpelo y consume su contenido, te ayudará a mejorar la velocidad de tu cultivo. Mi cuerpo también está casi curado, pero necesito hacer un viaje de vuelta a Nube Colgante. Volveré urgentemente , quédate donde estás y cultiva tranquilamente, espera mi regreso... Pequeña Yan, cuídate. ¡He estado pensando en ti constantemente! Noveno Querido.
Era de Bai Cheng Feng.
La comida que se entregaba solía ser bollos ordinarios, pero hoy era Lingzi de Jade de Tinta.
Aunque Huan Qing Yan no lo deseara, no tenía más remedio que aceptar.
No se permitían visitas en el Acantilado de la Reflexión, Bai Cheng Feng debía haber pagado una gran cantidad para hacer este arreglo de entrega.
Estaba lleno de buenas intenciones.
Huan Qing Yan hizo un recuento y descubrió que había más de cien piezas de Lingzi de Jade de Tinta, Bai Cheng Feng era muy generoso...
Si se lo diera a ella personalmente, definitivamente no lo habría aceptado.
Pero ahora, aunque quisiera, no podría devolverlo.
Necesitaba plantas espirituales raras para cultivar en este momento, comer una equivaldría a varias comidas.
Además, se podían plantar en su dimensión, y una vez cosechadas, podría devolver varias veces la cantidad de lo que le había dado.
Bai Cheng Feng también se había ido.
Huan Qing Yan adivinó que había regresado a Nube Colgante para recibir el título de Príncipe Heredero.
Por desgracia, ella no tenía ningún interés en él, no se molestó en perder el tiempo para pensar más profundamente.
Por culpa de él, el Joven Maestro Ya la malinterpretó.
No importa lo que él haga, en el fondo de su corazón, ella siempre sentiría repulsión hacia él.
Este hecho nunca cambiaría por mucha Tinta Jade Lingzi que le diera...
