Capítulo 5
Me alejé de Adrián cuando sentí mis labios entumecidos. Abrí los ojos con sorpresa y sentí a mis mejillas sonrojarse por la vergüenza. Él no había continuado con el beso. No hizo ningún movimiento para besarme de regreso. ¿Se habrá molestado? ¿Me tomé atribuciones que no me corresponden?
—Yo... lo siento, lo siento tanto... No volverá a pa-...
Adrián estrelló sus labios con los míos, y los movió con fiereza, cerré los ojos y solté un jadeo de sorpresa, traté de seguir su ritmo, pero... jamás había besado a nadie en mi vida
—Lo siento, no sé besar—susurré, cuando minutos después se separó de mí. Junto su frente con la mía y soltó una risa baja, demasiado débil
—¿Enserio? Porque para mí ha sido el mejor beso de mi vida
Volvió a darme un beso, pero este fue más inocente, una simple caricia, para calmar el fuego que había explotado sobre nosotros minutos antes. Tomó mi mano entre las suyas y entramos juntos al edificio. Aplane los labios, tratando de ocultar la sonrisa que bailaba sobre ellos
El mejor día de mi vida
[...]
¿Quién fue el genio que dijo que las cenas de negocios podían ser divertidas? Porque era una absoluta mentira, tomé entre mis dedos el tenedor, y solté un suspiro de cansancio, Adrián charlaba animadamente con un hombre, y las mujeres de la mesa me evitaban sin pena alguna. ¿Por qué creí que sería divertido venir?
Mire el filete de Adrián, un filete que seguía intacto, porque él estaba demasiado ocupado, como para preocuparse en llevar alimento a su boca, sin pensarlo demasiado, corté un pedazo pequeño de él, y acerque el tenedor a los labios de Adrián, él dejó de hablar y volteó a verme, abrió la boca y se comió el bocado. Un poco más animada, corté otro pedazo, y volví a dárselo en la boca, y él continuó aceptando los trozos que acercaba a sus labios
Un golpe en mi pantorrilla, me hizo voltear a ver al culpable, mire con fastidio a Damon, y él negó hacia mi tenedor, cortando otro pedazo para Adrián, fruncí el ceño y lo ignore, volví a darle a Adrián un poco más, él aceptó gustoso, cuando el segundo golpe llegó, solté un quejido, y baje la mano para acariciar el lugar maltratado
—¿Todo bien?—preguntó Adrián en mi oído
—Damon acaba de patearme por segunda vez—susurré, Adrián volteó a ver a Damon con los ojos entornados, y este negó con la cabeza
—Necesito que alguien me acompañé por otra bebida, me duele un poco la rodilla—se justificó Damon, pero sabía que mentía, aun así me levanté, y dejé que se recargara sobre mi hombro—Tienes una prometida, encantadora, Adrián—le guiño un ojo, pero este decidió ignorarlo y continuar con su plática
Cuando nos alejamos un poco, él se alejó de mi, arregló su saco y prendió un cigarrillo
—Creo que esta prohibido fumar aquí
—Deja de hacer eso—parpadee, confundida por sus palabras, no había hecho nada
—¿Qué?
—Darle de comer en la boca a Adrián. Solo estás avergonzándolo. Es un hombre poderoso, y le estas rebajando poder al hacer esas tonterías. Por Dios, Emmy jamás hubiera hecho una tontería así
Guarde silencio, e inhale profundo, tratando de calmar el dolor en mi pecho. Jamás había sido grosera con Damon, quizás he mantenido mi distancia con él, y con los demás amigos de Adrián, pero no había sido mala con ellos, entonces, ¿por qué ellos eran tan malos conmigo?

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Ineffable
ChickLitLibro 2 de la saga "Amores que duelen" Ineffable: aquello que no puede ser expresado con palabras No estaba destinada a casarme con él. Yo soy el nuevo sacrificio que debe casarse con el solitario lobo feroz. Pero al contrario de lo que todo mundo...