Capítulo 5

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Soy una completa mentirosa, a la que por fortuna sus papás le creían, sabían que no soy de llevarme pesado con nadie ni tampoco de peleas, mi historia era creíble para mi familia y parece que se quedaron tranquilos cuando escucharon la palabra sanción, de otro modo al saber que Christopher dejó estas marcas en mis muñecas por su fuerte agarre, seguramente habrían armado la tercer guerra mundial.
Después de mi estupidez comimos sin más mientras papá nos contaba como había estado su día, teníamos la fortuna de verlo durante dos horas en la comida antes de tener que volver al trabajo, llegaba a la hora de la cena así que también podíamos compartir juntos así como el desayuno, adoraba con locura a mi familia, por eso es que mentirles a veces me hacía sentir un poco culpable, la confianza que mis padres nos brindaban a mi hermana y a mí, era tal que no hacía falta mas que hablar con total verdad, pues siempre buscaban la manera de ayudarnos, escucharnos y apoyarnos, aunque cuando nos hacían daño pasaba justo lo que yo quería evitar que pasara con Christopher.
Luego de la comida subí a mi habitación para comenzar con mis tareas, sin embargo Daniela tocó la puerta.

- ¿Puedo pasar ___? - Preguntó.
- Claro Dani, pasa -.

Ella se sentó en mi cama y yo giré sobre mi silla para poder verla.

- ¿Qué pasa? - Inquirí.
- ¿Puedes darme un consejo? Es que necesito hablar de lo que siento con alguien, y sé que si se lo cuento a mis amigas ellas me dirán algo que tal vez yo también pienso, en cambio tú podrás decirme algo más -.
- Claro Dani, cuéntame -.

Ella suspiro y comenzó a hablar.

- Hay un chico en mi clase que me gusta muchísimo, digamos que es el típico chico que todos consideran 'malo' - Dijo haciendo comillas con sus dedos y poniendo los ojos en blanco - Él a veces mi mira de una forma muy linda, y la verdad es que yo jamás lo he visto hacer alguna de las cosas que dicen que hace, aunque a veces él alardea mucho porque le gusta ser el centro de atención, hoy me confesó que yo le gusto, pero la verdad me da un poco de miedo pensar en eso puesto que no sé si es verdad o no ya que su actitud me confunde un poco, tú siempre has dicho que debemos conocer por nuestra cuenta a las personas y no dejarnos llevar por las apariencias o lo que los demás dicen, pero en serio es muy complicado para mí - Explicó.

Vaya problemas los de mi pequeña hermana.
De alguna forma nos encontramos en las mismas, claro que con algunas diferencias de por medio, como el hecho de que Christopher no alardea ni tampoco me gusta o yo a él.

- Escucha Dani, ustedes son tan chicos aún, quince años los hace tan inmaduros, y estoy segura de que esa es la razón por la cual ese chico alardea para tener atención, a mi parecer creo que debes hablar de frente con el chico, ya te confesó que le gustas, si realmente él te gusta también, entonces pregúntale directamente quien es en verdad y que quiere contigo, demuestrale que eres una chica en la que se puede confiar para que entonces él te hable con la verdad, tal vez puedas descubrir mucho más y tus dudas puedan quedar aclaradas, no dejes que nadie más que tú influya en tus decisiones, y si de plano el chico no sabe responder a tus preguntas, deberás pensar muy bien que quieres hacer por tu bien, no me gustaría que resultaras lastimada, todo es cuestión de que uses el diálogo - Dije.

Y que evite espiar a sus compañeros de clase por la curiosidad que despiertan en ella al conocer tan poco pero al mismo tiempo mucho acerca de ellos, me repetí mentalmente.

- Hermana, eres la mejor de verdad, muchas gracias por ayudarme -.
- Siempre lo haré Dani, ahora piensa muy bien que harás y como, no te presiones, deja que las cosas fluyan - Aconseje.

|Una semana después|

Había tratado de conseguir toda la información que me fue posible acerca de Christopher pero nada, siempre hacía lo mismo, mirar su cuaderno, no cruzar palabra alguna con alguien, salir de clases e irse en su moto, completamente solo, ¿Por qué no hacía algo más que eso?
Claro que él y yo no habíamos vuelto a cruzar palabra alguna, ni siquiera me miraba, parecía que en verdad no me toleraba ni un poquito, y tal vez había llegado el momento de no intentar nada más, quizá podía llegar a descubrirme fisgoneando y mirándolo y entonces sí va a enojarse de verdad.
Entre pensamientos caminé por el patio de la escuela hasta que escuché a una bola de chicos hablar sobre Christopher.

- Debe seguir siendo secreto, esas carreras son clandestinas pero se ponen demasiado buenas -.
- ¿Christopher correrá? -.
- Por supuesto que sí, jamás se perdería una de esas carreras, además, sabe que es el mejor y ganará, sea lo que sea es muy bueno en eso y debemos admitirlo -.

¿Christopher Vélez? ¿Estaban hablando de ese Christopher al que tanto temen? ¿Carreras clandestinas? O diablos, ahora quería saber más.
Tratando de no verme muy obvia me acerqué un poco más a los chicos con la mirada en el celular, no debían notarme.

- ¿Y correrán donde siempre lo hacen? -.
- Claro, la esquina norte tiene las mejores pistas, la policía tardaría en llegar, claro que no iban a arriesgarse -.
- ¿Ustedes irán? -.
- Yo creo que sí, será divertido -.
- ¿A qué hora será? -.
- A las doce se reúnen en la línea de meta, supongo que debemos llegar un poco antes -.

Esquina norte a las doce, ¿Cómo haría para poder asistir? No tenía ni la más mínima idea, tal vez tenga que escaparme ya que de ninguna manera mis padres me dejarían salir a esa hora de la noche y mucho menos a unas carreras clandestinas, podía mucho más mi curiosidad por saber si se trataba de Christopher Vélez, y por supuesto que por saber algo más, un poco más.

|Obsesión| Christopher Vélez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora