Capítulo 41

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- Chris, llevamos varios meses juntos, amor somos un equipo, te agradezco inmensamente que me cuides tanto pero no a base de mentiras, si tú me lo hubieras dicho antes habría entendido, justo como ahora lo hago, y más que nunca quiero que te sientas acompañado y apoyado por mí, quiero que mi amor sea un impulso para ti, Chris, no es justo que sigas cargando con problemas que no buscaste, tienes dieciocho años y ya pareces más adulto que muchos que ya lo son - Dije.

Mi mano comenzó a acariciar su mejilla.

- Quiero estar contigo en las buenas, en las malas y sobre todo en las peores, pero debes ser honesto conmigo para que te pueda entender, y ya sé que no es fácil pero te juro que yo no voy a juzgarte, amor eres lo más lindo de mi vida, no quiero perderte -.
- Mi bonita - Dijo envolviendome entre sus brazos - Tenía tanto miedo, temía que quisieras irte de mi lado, no volver a besarte o abrazarte me mataría por completo, a partir de hoy no habrá más secretos, lo prometo, somos un equipo y quiero que eso jamás se destruya -.

Lo miré con una sonrisa y besé sus labios.

- Te amo Chris, de verdad lo hago - Me sincere.
- No más de lo que yo lo hago, eres la luz de mi vida, y no te miento cuando te digo que de no haber sido porque tú llegaste a mi camino ya me habría vuelto loco -.
- Déjame ayudarte entonces, no sigas haciéndolo solo -.

Él de inmediato me miró serio.

- No amor, este problema es mío y yo voy a resolverlo - Afirmó.
- Es que no puedes ser egoísta, ¿Qué te impide aceptar mi ayuda? - Pregunté.
- Que no voy a dejar que cargues con problemas que no son tuyos, no tienes ninguna necesidad -.
- Christopher soy tu novia -.
- Exacto, mi novia y -.
- Y no espero la vida perfecta llena de mariposas alrededor de nosotros - Dije interrumpiendolo - Christopher entiende, quiero que me dejes formar parte de todo, puedo trabajar para ayudarte, o quizá puedas enseñarme a usar la moto y entonces pueda correr también - Propuse.
- No, me rehuso, te has vuelto completamente loca, ni trabajar ni carreras por tu cuenta - Dijo seguro.
- Pero Chris -.
- Chris nada, no ___ -.
- Pues ¿Sabes algo? No tengo que pedirte permiso, y puedo encontrar a alguien que me enseñe si tú no quieres - Dije.
- Solo si yo lo permito - Amenazó.
- ¿Crees qué te avisaré? Puedo ser más discreta de lo que imaginas, y no te va a gustar nada la ayuda que buscaré -.

Pude ver cómo su semblante se torno muy serio y enojado.

- Ni lo intentes - Advirtió.
- ¿Entonces me vas a ayudar tú? - Pregunté con una sonrisa casi triunfadora.
- No, ya te dije que no - Dijo con seguridad.
- Bien, pero después no te quejes, porque no será Vanesa a la que yo acuda - Dije con la misma seguridad de su respuesta.

Intenté acercarme a su rostro para darle un beso pero él se alejó un poco.

- Volviste a salirte con la tuya, pero te juro que es la última vez - Dijo.
- La última cielo - Dije divertida tomando sus mejillas para que esta vez no pudiera rechazar mi beso.
- Si no te amara como lo hago estarías enojada conmigo por el rotundo no -.
- Pero cómo me amas demasiado estoy feliz, ¿Y sabes qué más me hace feliz? - Inquirí.
- ¿Qué más te hace feliz mi amor? -.
- Que tenemos varios días solitos, y justo ahora tengo ganas de portarme mal contigo - Mencioné colocándome sobre él.
- ¿Ahora quieres manipularme con tus encantos? - Preguntó divertido.
- Lo haría toda la vida mi Chris -.
- Entonces te haré el amor una y otra vez hasta que me ruegues detenerme -.
- Pues terminarás agotado porque eso no va a pasar - Aseguré.

(...)

- Tengo carrera mi amor, ¿Quieres venir conmigo? - Preguntó.
- Me encantaría, solo que no traigo la ropa adecuada - Dije.
- Aún es temprano, si quieres podemos ir a tu casa para que te cambies, nos bañamos juntos aquí, te presto ropa y nos vamos, ¿Te parece? -.

Bañarnos juntos, me encantaba como se escuchaba eso.

- Está bien cariño, oye por cierto, ¿De quién es el auto y dónde está tu moto? - Pregunté confundida.
- El auto es del papá de Rich, me lo prestó porque iba un poco más ebrio de lo normal y no quiso que nada malo me pasara, él se llevó mi moto, en la mañana hablé con él para decirle que se lo iría a dejar a su casa más tarde, ¿Me acompañas? -.
- Por supuesto amor -.

Luego de días sintiendo que mi relación se iba por la borda, sintiendo que perdía a Chris con el paso de los segundos, al fin podía sentirme de nuevo viva, explicar lo que me hace sentir cada acción de su parte me parece imposible porque me pondría a gritar como loca de la emoción que me causaba, ahora sentía que ya me estaba haciendo parte de su vida y eso me llenaba por completo porque era una muestra de confianza enorme que no le daría a cualquiera, él es mi obsesión, es quién revolotea y pone de cabeza mi mundo, es quién logra hacerme sentir amada y afortunada, ¿Acaso estaba mal sentir que es el aire que respiro? El tiempo no siempre define lo que puedes o no sentir por una persona, claro que es un factor que influye, pero lo que define con cuánta intensidad vas a amar a alguien es la química, es esa conexión que se forma de tal manera que te parece raro incluso imaginarte sin esa persona, y tal vez no se muera de amor, pero sí se se sufre y sientes que la vida se te va en ello, y luego de todo lo que ya he vivido con este hombre no quiero imaginarme en los brazos de nadie más, no quiero pensar que algún día tendremos que dejarnos ir, quiero que Chris se pueda enamorar de mí cada día, porque de esa misma forma me pasa, no hay día que pase sin que yo lo quiera junto a mí.

|Obsesión| Christopher Vélez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora