Proyecto L

Capítulo 35

—Eso es obvio, ¿no?—dijo Momo inclinando su cabeza.

—No babosa, ellas son zombies se supone que están muertas, pero, ¿exactamente a que se refiere con "están vivas"?—Jeongyeon quiso una mejor explicación.

—Los humanos cumplimos ciertas condiciones para estar vivos, por así decirlo, pero los zombies son la excepción a eso, no quiero alargar la explicación con tecnicismos que no van a entender, así que simplemente diré que el corazón de Jisoo late fuerte y claro—la doctora siguió revisando a la mutante con un brillo en sus ojos, su lado científico nunca se fue, solo permaneció dormido.

—¿Entonces Chu es humana?—los ojitos de Rosé permanecieron fijos en su novia.

—¿Chu? Eh, no. No son humanas ya que un humano adulto normal sus latidos en los rangos normales son de sesenta a cien latidos por minuto, en cambio Jisoo tiene diez latidos por minuto, es una cifra inconcebible para nosotros los humanos, automáticamente moriríamos. Por favor, Lisa, ven aquí.

Jennie fue junto con Lisa, no quería separarse de ella, sabía que la doctora Joohyun era buena y hacia su trabajo, pero en secreto miraría que no esté tocando de más a su hermosa mutante. Al igual que Jisoo, Lisa también tenía los mismos latidos por minuto. La revisión se tardó aproximadamente una hora y media, la cual también utilizaron para informar todo sobre las gemelas, hasta el mínimo detalle, información que fue dada por Rosé y Jennie.

—¿Entonces cuál es tu opinión?—G-Dragon fue paciente y esperó que la doctora despejará todas sus dudas.

—Ellas no son zombies, pero tampoco son humanas. El término mutante está muy bien empleado en ellas. Mi hipótesis es que su metabolismo trabaja a niveles extremadamente lentos, ahora si lo que quieres saber es si van a tener la necesidad de comer entonces es sí, ellas van a tener hambre—informó segura.

—Ya veo—el hombre quedó pensativo.

—Pero eso no significa que coman humanos, ¿verdad?—Jennie apretó fuerte la mano de Lisa.

—No lo sé, su dieta puede diferir mucho en la de un humano normal—la mujer no mentía, no tenía idea sobre aquello.

Todos adquirieron un aire reflexivo, ese simple dato sobre las gemelas hizo que se cuestionaran si en el momento que tuvieran hambre serían como los zombies o como los humanos. G-Dragon fue hasta ellas y preguntó:

—¿Lisa y Jisoo que es lo que comen? Ya saben, ustedes han visto a Rosé y Jennie comer.

Las gemelas se miraron entre sí, lo meditaron por unos instantes antes de responder. Lisa se dirigió hasta Momo y la sujetó.

—¡Hey, hey, ya sé que estoy deliciosa! ¡Pero pensé que éramos amigas!—lloriqueó—¡Dubu, no olvides que eres la única para mí!

—Ruidosa, solo querer esto—extrajo una nuez del bolsillo de la japonesa.

Al mismo tiempo Jisoo se dirigió hacia la doctora y extendido su mano hasta llegar al bolsillo delantero de la bata y sacar una bolsita pequeña de almendras. Ambas fueron y le mostraron lo que comían a G-Dragon.

—¿Esto es lo único que comen?—él examinó con cuidado los frutos secos. Ellas asintieron.

—Tiene sentido...—dijo la doctora Joohyun—. Lo que tienen en común es que las nueces y las almendras son ricas en hierro. ¿A qué se les viene a la mente cuando digo hierro?

—¿Sangre?—respondió Tzuyu.

—Exacto señorita Chou, pero debe haber otro componente, debería investigarlo, ¿comen otra cosa que no sea esto?—señalo los frutos secos.

—No, solo comer eso, saber rico, otros saber feo—Lisa hizo una mueca de desagrado.

—Olor atraer nosotras—Jisoo se señaló a ella y a Lisa.

Jennie y Rosé dejaron que el aire salga de sus pulmones al escucharlas decir que no comen humanos y que básicamente practicaban el veganismo, pero de algo estaban seguras, aún si su respuesta hubiera sido que comen humanos ellas no se hubieran alejado, ya era muy tarde para eso, no podían pensar en una vida sin ellas. Solo se pusieron a recordar que ellas jamás habían visto comer a las gemelas en todo el tiempo que llevan con ellas.

—Bueno eso es lo único que quería saber, chicos pueden retirarse y, por cierto, doctora Bae si quiere examinar más a profundo el cuerpo de las mutantes deberá pedir permiso a las chicas—G-Dragon avisó de antemano, él ya no iba a intervenir en ese asunto.

—De acuerdo, en este instante no tengo los medios para realizar un examen adecuadamente—por el momento anotaría todo lo que descubrió de las gemelas en una libreta.

—Bien, entonces por favor todos vuelvan a sus labores y chicas recuerden que su misión ahorita es hacer que los habitantes acepten a las mutantes o lastimosamente ellas tendrán que irse, piensen con cuidado lo que van hacer, pueden retirarse—agradecieron al hombre por darles la oportunidad de que Jisoo y Lisa se queden con ellas. Se despidieron con gestos y se fueron—. Ustedes también Namjoon y Seulgi, quiero hablar en privado con la doctora Joohyun.

Los nombrados hicieron caso a la orden del líder y se retiraron, pero ambos sabían que lo que sea que fuera hablar con la mujer debía ser de suma importancia o caso contrario no tendría una mirada tan seria. Escucharon como la puerta fue cerrada.

—¿Por qué nunca hablaste de ellas?

—No lo vi necesario para nuestra misión, no había caso—fue a sentarse en la camilla—. Después de todo nadie sospecharía de una de las mentes más brillantes del siglo XXI, además, dudo mucho que alguien se percatara que el guardia don nadie en realidad era espía de la inteligencia coreana, ¿verdad? Capitán Kwon Jiyong.

—Ya no soy capitán, todo eso ahora está en el pasado. Ahora solo dirigió un pequeño refugio—fue a sentarse a su lado.

—Jiyong no es tu culpa que todo esto haya pasado—ella conocía todos los demonios que le atormentaban.

—Sí lo es, no cumplí mis deberes correctamente. Y por eso el mundo se fue a la mierda, si tan solo hubiera hecho caso a mis instintos y no a mis superiores, si tan solo no hubiera esperado un día más—se lamentó profundamente y bajo la cabeza cubriéndose el rostro.

No había palabras para sacar esa idea de la cabeza de su amigo, no importaba cuantas veces intentara hacerlo recapacitar que todo lo que ocurrió no había sido culpa suya, de nadie, solo de los estúpidos que comenzaron el proyecto. Por eso él construyó un refugio, para redimirse. Tal vez no sea muy grande, pero él se aseguró que dentro en el refugio lleven una calidad de vida lo más normal posible, por eso se esforzaba demasiado y cada uno de los residentes lo notaba, por eso podían vivir medianamente bien. Suspiró y acarició los cabellos de su amigo, fue su manera de consolarlo por llevar una carga tan pesada.

Nada de esto fue tu culpa, Jiyong.

Si te gustó vota, comenta o sígueme (^-^)/