Proyecto L

Capítulo 29

Rosé y Jisoo se hallaban solas en el departamento después de que las chicas se fueron. Rosé se sentía un tanto incomoda porque el silencio era abrumador, intentó hablar con la mutante más ella no dijo nada y solo la hizo sentir peor y sus lágrimas huyeron de sus ojos. Jisoo se alarmó y fue directo hacia ella.

—¡Rosé! ¡¿Qué pasa?! ¡¿Sentirse mal?!—la observó meticulosamente.

—¿Por qué...?—su voz salió tan rota—¿Hice algo mal? ¿Por qué me evitas?

Y rompió en llanto, le dolía tanto la indiferencia de Jisoo que a veces le costaba respirar, ni siquiera cuando descubrió que se quedó sola con Jennie en el mundo zombie dolía tanto. Se aferró a la camiseta de la zombie y escondió su rostro en el pecho dejando salir todo lo que le afligía.

Jisoo sintió un sabor amargo recorrerle la boca, su Rosé lloraba y era su culpa, nunca imaginó el daño que le estaba haciendo a su hermosa humana y se sintió fatal, otra vez la hizo sentir mal ¿acaso no podía hacer nada bien? Separó a Rosé de su cuerpo y en un susurro dijo:

—Lo siento...

Y juntó sus labios, un beso cargado de emociones que quiso transmitir todo lo que sentía por ella, deseó que esa muestra de amor sea suficiente.

—No hacer daño, no de nuevo—Jisoo elevó los labios, una sonrisa triste—. Gracias, Rosé.

La rubia aún seguía aturdida por el beso, dejó de sentir el frío tacto de los dedos contra su mejilla. Miró como Jisoo se puso de pie y caminó hacia la puerta, salió del departamento. Por unos segundos permanecido en su lugar para luego reaccionar y salir corriendo en busca de la gemela, más no la halló en los pasillos ni en las afueras.

—¿Rosie? ¿Qué pasa?—oyó la voz de Jennie y fue veloz hacia ella.

—¡S-se fue! ¡Se f-fue, J-Jisoo se fue!—gritó con lágrimas recorriendo sus mejillas.

Lisa y Jennie cruzaron miradas y decidieron que lo mejor era llevar a la australiana al departamento.

Pero Rosé lo sabía, sabía que algo estaba mal cuando Jisoo le mostró esa sonrisa tan triste, cuando le dijo que nadie le haría daño se refería a ella, todo era su culpa, Jisoo la abandonó y ese beso fue la prueba de que se estaba despidiendo, un último beso.

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Han pasado tres días y Jisoo no volvió con ellas. El estado de animo de la rubia era desesperante y a todos los tenía preocupados, según Jennie se la pasaba llorando y tampoco hacía el intento de comer, lo cual denotaba lo grave de la situación.

—¿Cómo sigue?—preguntó Dahyun.

—Igual, tampoco me quiso decir que pasó entre ellas—Jennie suspiró pesadamente.

—¿Quién esta con ella?—Tzuyu se masajeo el cuello.

—Lisa—sonrió en pensar en su mutante.

—Por esa sonrisa diría que besa bien—dijo Momo alzando las cejas de forma sugerente.

—Puff, obvio besa bien, es mi novia después de todo—la castaña realizó una pose de diva, aunque las mejillas sonrojadas la delataron, además ambas estaban aprendiendo al ser novatas.

Al día siguiente de haber aceptado ser la novia de Lisa le dijo a todos sus amigos sobre su relación con la mutante, todos saltaron de alegría y la abrazaron, estaban muy felices por ella y Lisa, a excepción de Chaeyoung que apostó con Jeongyeon sobre que Lisa se iba echar para atrás, pero perdió, ahora le debe dos latas de cerveza y una caja de chocolate.