Ana ya le había dado la noticia a su hermana y ahora esperaban que el médico terminara. Su esposo y los niños se habían quedado en casa, pero Verónica había querido ir, por lo que la había seguido en su coche. Se sentó junto a la morena, retorciéndose las manos con nerviosismo, ella se las alcanzó y las detuvo, sonriendo levemente.
-Lo siento- dijo la castaña en voz baja.
La menor se acercó más.
-¿Estás más preocupada por lo que el médico va a decir o porque adivinará lo que estábamos haciendo anoche?- se rió en voz baja mientras un rubor cubrió el rostro de Verónica.
-Tomando en cuenta que ninguna de nosotras parece haber dormido, no habrá mucho que adivinar.
La mirada de Ana se posó en la boca de la mayor, sus labios todavía ligeramente hinchados de su noche... Y mañana... Juntas. Levantó la vista y sus ojos se encontraron, de pronto deseó estar en cualquier lugar, menos en la sala de espera de un hospital. Deseaba estar de regreso en la ducha, donde Verónica la había presionado contra la pared, llevándola al orgasmo de una manera tan rápida que parecía un vago recuerdo. La ojiverde sonrió y asintió, reconociendo la dirección de sus pensamientos.
-¿Gabriel?- todos voltearon y la enfermera les hizo señas- Ahora pueden verla. El médico regresará pronto para encontrarse con ustedes.
-Gracias- dijo ella permitiendo que su hermana y Verónica se adelantaran.
Su madre, afortunadamente, lucia bien aunque cansada. Ana se inclinó rápidamente y besó su mejilla, notando que Isabelle ya había tomado la mano de la castaña.
-Me siento mucho mejor- avisó- No quiero a nadie quejándose sobre mí.
-Mamá, sabemos sobre el cáncer- dijo su hermana.
Isabelle movió sus ojos hacia Verónica y sonrió.
-Nunca pensé que te lo guardarías para ti- también miró a su hija, su mirada iba entre ellas- ¿Sería inapropiado de mi parte decir que las dos están radiantes esta mañana?
La morena se sonrojó de pies a cabeza- ¿De verdad, mamá? ¿Ahora?
Su hermana rió- Por eso es te ves como que si no hubieses dormido.
Ana miró impotente a la castaña, pero Vero simplemente rió y apretó la mano de Isabelle.
-Seguí tu consejo- dijo ella.
-¿Podemos hablar sobre tu salud?- intervino la morena, todavía ruborizada.
La sonrisa de su madre se desvaneció- No hay nada que discutir. Ya conozco mis opciones.
-¿Dónde... Dónde está?
-En los pechos nuevamente. En esta ocasión seguiré con la cirugía- apartó la mirada de ellos- Debería haberlo hecho antes, supongo, pero perder uno... Bueno, no estaba preparada en ese entonces.
-Está bien, si te hacen una mastectomía total, ¿todavía tienes que hacer quimio o radioterapia?- preguntó Ana.
-El doctor dice que verán cuan invasivo es el cáncer. Eso determinará si voy a necesitar tratamiento adicional- su madre se acostó nuevamente sobre la almohada- La idea de volver con la quimioterapia nuevamente... Bueno, no sé si pueda manejarlo.
-Pero...
-No. Estoy cansada de pensar en ello. Daremos un paso a la vez- tomó una respiración profunda- Ahora, vamos a hablar de otra cosa- se volteó hacia la castaña ¿Va a regresar Cristian a casa este fin de semana?
-Sí- asintió- Lo veré mañana por la noche.
Ana había olvidado que Cristian regresaría a casa.
![](https://img.wattpad.com/cover/322790217-288-k531336.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Para Siempre...(VerAna)
RomanceAna y Verónica se conocieron cuando tenían diez años de edad. Se convirtieron en buenas amigas, pero ambas sabían su lugar en la vida. Nunca hubo duda alguna que se convertirían en amantes, también nunca hubo duda alguna en que Verónica se casaría y...